Campeona en Chicago, con un pie en las WTA Finals y líder de España en la Fed Cup, Garbiñe (27 años) quiere “seguir con esa inercia” en Indian Wells.
Garbiñe Muguruza afronta el tramo final de la temporada con una sonrisa, con “buen feeling” según su definición y con el segundo título del año en el raquetero.
La española, de 27 años, ganó el domingo el WTA 500 de Chicago con un ejercicio de fe: remontó un set a la tunecina Ons Jabeur y en el segundo levantó dos breaks.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
“Un título no se consigue todos los días y ahora llega Indian Wells, un torneo que adoramos y en el que espero seguir con esta inercia”, explicó a AS desde Chicago nada más finalizar el partido.
El equipo de Conchita Martínez ha planificado el último tramo de la campaña con mimo.
Tras el US Open, Muguruza realizó una minipretemporada en San Diego, se acercó a la Ryder Cup para seguir durante una jornada a Jon Rahm y Sergio García y afrontó el Fall Tennis Classic con la determinación de lograr un buen resultado que la acercara a las WTA Finals, el Masters femenino que se jugará del 10 al 17 de noviembre en Guadalajara.
Los 470 puntos de botín en Chicago la sitúan ya sexta en la carrera, a sólo seis puntos de la griega Maria Sakkari. Van ocho.
La número uno Ashleigh Barty podría renunciar y la octava, Naomi Osaka, está en un parón indefinido. Por delante, Barty, Aryna Sabalenka, Barbora Krejcikova y Karolina Plikova tienen asegurada su plaza.
Ella sería el ‘Latin Power’ de una cita que se desplazó de China a México por la pandemia y que hablará en español.
“Estar entre ocho primeras indica que las cosas han ido bien. Aún no estoy clasificada, pero es sin duda uno de los objetivos del año. Que sea en Latinoamérica es una gran motivación para mí”, apunta la doble campeona.