La economía mexicana inició la segunda mitad del año decepcionando a los participantes del mercado, cuyo desempeño fue limitado por las condiciones en torno a la pandemia de Covid-19.
La actividad nacional rebotó 0.5% durante julio con relación a junio, cuando sufrió una caída de 1.1% y fue la más severa desde mayo del año pasado, señala el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) del Inegi, una especie de Producto Interno Bruto (PIB) mensual.
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La economía se expandió menos de lo previsto por analistas. Por ejemplo, Banorte proyectaba un crecimiento de 1.0% y CitiBanamex de 0.9%.
En particular, las actividades relacionadas con los servicios lograron avanzar 0.3% en julio, tras caer 0.5% en junio, las cuales contribuyen con dos terceras partes del PIB y están asociadas al consumo de los hogares en el país.
Destaca que los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, los cuales están relacionados con el turismo, registraron un crecimiento de 0.9% y fue su desempeño más lento desde febrero pasado.
Por su parte, la industria registró una expansión de 1.1% en julio y significó su mayor avance desde octubre del año pasado, la cual aporta una tercera parte del PIB y está más ligada con el comercio exterior.
Sobresale el aumento de 1.4% en las industrias manufactureras, mientras la construcción se incrementó 0.6% y la minería ligó dos meses a la baja al reducirse 0.3%, señala la información divulgada por el Inegi.
“Después de haber disminuido 1.1% m/m en junio de 2021, el Indicador Global de la Actividad Económica creció 0.5% en julio de 2021; con este avance quedó a un nivel similar al de abril 2021 y 2.9% por debajo de su máximo en agosto 2018”, tuiteó esta mañana Julio Santaella, presidente del Inegi.
