Introducción a los préstamos personales

Los préstamos personales son productos financieros que pueden ayudar a restablecer la economía y el presupuesto de cualquier persona o negocio. Esto, se debe a que es una forma rápida y segura de obtener dinero, lo que los hace ideales para cuando se quiere solventar una situación de emergencia.

Si bien hay que tener en cuenta que deben solicitarse y utilizarse de forma correcta, los prestamos personales representan esos productos financieros que, con pocos requisitos y avales, pueden ser aprobados.

Para que una persona pueda obtener un préstamo personal, debe realizar una solicitud que conste de: documento de identificación, número de cuenta bancaria con acceso a banca por internet, correo electrónico, número de teléfono propio y residencia demostrable en México. En la mayoría de los casos, los préstamos personales son aprobados, ya que el aprobarlos también resulta beneficioso para las entidades. Sin embargo, puede que sean rechazados si la persona tiene una cantidad exuberante de deudas pendientes o un mal historial crediticio. Si esto sucede y el préstamo personal se necesita para pagar las deudas pendientes, se puede explicar a la entidad mediante una carta, formulario o reunión para llegar a un acuerdo de reunificación de deudas. De esta manera, se pueden pagar las deudas pendientes con un préstamo personal para que así, solo quede pendiente la deuda con la entidad y esta pueda ir pagándose poco a poco.

Los préstamos personales no solo sirven para pagar deudas, también se pueden utilizar para financiar un producto o un proyecto personal (de ahí su nombre) como, por ejemplo, la remodelación de la cocina o el baño. El detalle está en que, dependiendo de la entidad en donde se solicite, esta puede pedir avales o explicaciones de para qué se va a utilizar el dinero. No obstante, muchas entidades se han dado cuenta que pueden tener avales de otras maneras, por lo que ahora son muy pocas las que los incluyen en sus requisitos.

Cuando se solicita un préstamo personal, debe tenerse en cuenta que se puede hacer en entidades bancarias y en entidades no bancarias. Generalmente, las entidades no bancarias pueden aprobar los préstamos personales con menos requisitos y la solicitud se hace en línea, pero los intereses a cobrar pueden ser un poco más altos, siendo esta una forma de protección para la entidad. Por otro lado, las entidades bancarias pueden llegar a ofrecer cantidades un poco más elevadas en primera instancia, pero con muchos más requisitos e intereses que pueden ser iguales o más bajos que el de las entidades no bancarias. Al haber tanta diversidad de opciones, es recomendable filtrarlas con un comparador de productos financieros.

Los préstamos personales pueden servir de gran ayuda, simplemente hay que establecer un presupuesto y un plan de pago para que puedan cumplir su propósito sin que el haberlos solicitado represente más deudas. Tener un plan de pago, hace que el proceso de solicitar y pagar un préstamo personal sea exitoso en un 98% de las veces. Así que, si se planea solicitar un préstamo personal, lo primero que debe establecerse es el monto, el plazo de pago estimado para devolverlo y los ingresos con los que se cuenta para sobrellevar el pago de las cuotas. De resto, el proceso se vuelve tranquilo y muy beneficioso para el solicitante.