Damian Priest es uno de los nombres de moda en WWE. El estadounidense, de orígenes puertoriqueños, logró el Campeonato de Estados Unidos en SummerSlam. Antes, venía de ayudar con un gran feudo a Bad Bunny. Está de moda y disfruta del momento. “Alzar el cinturón de EE UU en SummerSlam fue un momento de éxito. Hasta el aire era diferente. Fue una gran felicidad ver que puedes lograr tus sueños. Es increíble y un momento que no voy a olvidar”, reconoció en una entrevista para la web Planeta Wrestling.
El campeón tiene un doble objetivo en mente. El primero Extreme Rules (26 de septiembre): “¿Si estoy preparado para un combate de reglas extremas? Es más fácil porque vengo de la calle y allí no hay reglas. Pasé mucho tiempo defendiéndome en las callas y quizá tenga más experiencia en eso que otros luchadores. Mentalmente tengo que pensar que esto es una guerra y que va a doler más”, avisa.
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La siguiente parada será en Puerto Rico. Nunca peleó allí y lo hará con el show que WWE lleva allí el 2 de octubre. “Tengo muchas ganas de presentarme ante mi gente. Para mí, y lo dije cuando gané el campeonato, esto es para todos los latinos. No solo Puerto Rico”.
Por último, Priest miró el futuro más lejano. “Lo quiero todo, el mundo… Esto es como una escalera y voy subiendo peldaño a peldaño. Tal vez no llegue arriba, pero estoy teniendo grandes momentos. Ahora tengo que buscar otro gran momento en Extreme Rules y sea el que sea quien me rete me voy a enfrentar él”, afirma.
