Pobladores de Frontera Corozal acusaron a los agentes de Migración y de la Guardia Nacional de tráfico de especies protegidas, por llevar en sus camionetas varios loros, por lo que los detuvieron.
La madrugada de este sábado fueron liberados cuatro agentes federales del Instituto Nacional de Migración (INM) y siete elementos de la Guardia Nacional “retenidos por cinco días en condiciones deplorables y violatorias de sus derechos humanos en una jaula de madera y un pozo”, en un poblado de Frontera Corozal, Chiapas, denominado “El Chikle“.
En una tarjeta informativa, el INM dio a conocer que los 11 servidores públicos fueron llevados a Palenque, donde personal médico revisó su estado físico y recibieron alimentos, “para luego ser trasladados a sus lugares de adscripción laboral”.
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“Cabe mencionar que una agente federal de migración retenida en dicho poblado ubicado en el límite de México con Guatemala se encontraba con sus dos hijos menores, que la visitaban en su sitio laboral cuando fue privada de su libertad”, detalló.
Agregó que, en el caso de los niños, fueron atendidos y resguardados por Oficiales de Protección Infantil (OPI) del INM, mientras regresaba su mamá.
En videos difundidos en redes sociales, pobladores de Frontera Corozal acusaron a los agentes de Migración y de la Guardia Nacional de tráfico de especies protegidas, por llevar en sus camionetas varios loros, por lo que procedieron a detenerlos.
