La vedette se unió a un pequeño grupo de compatriotas en una protesta en la ciudad de Mérida.
Niurka Marcos lleva varios meses residiendo en Yucatán, donde según sus palabras, ha encontrado calma, tranquilidad y un paradisiaco paisaje.
Y ha sido en la ciudad de Mérida donde este miércoles 21 de julio, la famosa se ha sumado a las protestas en el consulado cubano de la entidad, oficina diplomática ubicada en la colonia Campestre, para clamar por ayuda humanitaria para la isla.
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Tras llegar en un automóvil Civic, la polémica vedette se congregó con un pequeño grupo de cubanos, con quienes megáfono en mano también alzó la voz para pedir por los derechos humanos de los habitantes de la isla caribeña que se encuentra en medio de movilizaciones y protestas contra el régimen de Miguel Díaz-Canel.
Sumada a las protestas locales, la bailarina expresó que en su país de procedencia existe un clima de incertidumbre.
Visiblemente consternada, la exesposa del productor Juan Osorio sostuvo que en su país de origen “hay temor, terror, pavor, por lo que está pasando”.
Niurka exigió al presidente de su país que le ponga un fin a la represión, justificando que en la isla antillana “la gente salió a la calle porque carece absolutamente de todo y no puede vivir así”.
Con banderas y cubrebocas alusivos al país cubano, la mujer escándalo opinó ante los medios presentes que a Díaz-Canel “le quedó grande el caimán y la está cagando”, por lo que se pronunció en favor de que “este gobierno que está en Cuba entienda que están haciendo mal las cosas”.
Al grito de “patria y vida”, la también cantante y sus compatriotas se manifestaron exigiendo la paz y mejores condiciones de vida para los que en la isla sufren el desabasto de medicamentos, alimentos y bienes básicos.
Y es que ha trascendido que en medio de las manifestaciones del pueblo cubano, se ha generado un ambiente violento y hostil, contra el que Niurka se pronunció
“No queremos más muertos, más desaparecidos y hay algo demasiado importante señores, es triste que las nuevas generaciones de hoy esto es lo que les haya tocado vivir, que nuestros jóvenes y niños estén pasando por estos sustos tan horribles y tan terribles.
Por eso es que no queremos en Cuba una guerra ni nada de eso”, expresó en medio de pancartas y cubanos con playeras estampadas con la bandera.
