Los científicos han analizado esta competencia, y según un artículo publicado en Plos One, los futbolistas de élite tienen mejores resultados en pruebas de habilidades cognitivas relacionadas con la memoria y la multitarea que el resto de la población.
“Los jugadores exitosos deben evaluar la situación de manera constante, compararla con situaciones anteriores, crear nuevas posibilidades y tomar decisiones con rapidez, además de inhibir decisiones ya planeadas con esa misma rapidez”, según los investigadores del Instituto Karolinska (Suecia).
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Esto permite que en una fracción de segundo decidan cómo actuar. Además, otro estudio de la Universidad de Brunel (Inglaterra) concluyó que los futbolistas experimentados activan más zonas del cerebro cuando se acerca un rival que los deportistas novatos. Esto les ayuda a no engañarse con las fintas.
“Creemos que este mayor nivel de actividad neuronal es algo que se puede desarrollar a través de un entrenamiento de alta calidad, por lo que el próximo paso será cómo entrenar el cerebro para anticiparse a los movimientos del rival”, dijo el autor, Daniel Bishop.
El doctor Francisco Aboitiz, neurobiólogo de la Universidad Católica, explica que hay dos sistemas que participan en la toma de decisiones: la corteza cerebral y estructuras más profundas del cerebro.
“Los ganglios basales toman decisiones muy rápidas en base a patrones de conductas que ya están programadas. Esos patrones pueden ser muy complejos”.
Según Aboitiz, aunque todos usamos estos mecanismos para, por ejemplo, andar en bicicleta y esquivar una piedra, los jugadores profesionales tienen más desarrollada esta capacidad y la usan más eficientemente.
“Es un proceso muy inconsciente”. En esto, agrega, influyen dos procesos: “Hay talento, pero también hay un entrenamiento que contribuye”.
