Un grupo internacional de científicos presentó durante los últimos días un nuevo estudio que busca responder a algunos de los tantos misterios que existen en el Sistema Solar: por qué existe una “isla” en una de las lunas de Saturno que aparece y desaparece de las imágenes de la sonda espacial Cassini.
La mancha fue vista en Titán por primera vez el 10 de julio del año pasado, sin embargo, no estuvo presente en tres vuelos previos sobre el Ligeia Mare, uno de los mares dentro del polo norte del satélite y compuesto por metano y etano. Asimismo, para el 26 de julio de ese mismo año, la mancha desapareció nuevamente y no volvió a ser observada en vuelos posteriores.
Ahora, de acuerdo a este estudio publicado en la revista Nature Geoscience, hasta el minuto existirían al menos cuatro teorías con respecto a este fenómeno presente en Titán, que no corresponderían a una isla real.
Según los expertos podrían deberse a olas, sólidos flotando, sólidos suspendidos o burbujas.
En el caso de las olas, es fenómeno dependería de los ciclos estacionales del satélite, que cambian cada 30 años. De esta manera, la “isla mágica” podría ser en realidad producto de un incremento de oleaje, que aparece cada vez que la parte norte del satélite entra en verano y que podría volver a ocurrir para mayo de 2017.
En cuanto a los sólidos flotando, la isla podría ser en realidad uno de los icebergs en este mar de Titán, que no corresponderían a moles de hielo sino que a una mezcla congelada de metano y etano. Gracias a esta composición las rocas se hundirían según la época por la que atraviese el satélite, lo que explicaría su ausencia, pero podrían volver a aparecer para el verano en este satélite.
Otra opción es que estas mismas estructuras estén cubiertas de varios compuestos orgánicos, que los haría capaces de flotar, pero solamente bajo la superficie del mar. Un fenómeno que les permitiría aparecer de vez en cuando y no permanentemente.
Ya como última opción aparecen las burbujas de gas, que subirían a la superficie del mar desde la boca de un volcán submarino y que podrían parecer como parte de la isla misteriosa en las imágenes de la sonda Cassini.
Esta alternativa sería hasta el minuto la mejor opción según los científicos, ya que, todavía no ha muchas evidencias sobre los otros fenómenos, como por ejemplo, sobre oleaje importante en el satélite. No obstante, los expertos no descartan que la razón detrás de esta isla misteriosa de todas formas pueda ser cualquiera de estas razones, o incluso parte de un fenómeno que quizás, todavía no ha sido considerado.
Se espera que futuras observaciones de la sonda Cassini puedan entregar pistas sobre este fenómeno, o por lo menos entregar datos para descartar algunas de estas teorías.
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