Amarran a niño a rejas de ventana como castigo

El presunto castigo a un menor de edad, el cual fue amarrado a las rejas protectoras de la ventana de su casa en la ciudad de Xalapa, fue exhibido por las redes sociales.
Vecinos del menor, identificado en las mismas redes sociales como Pablo N, denunciaron que sus padres frecuentemente lo castigan amarrandolo de pies y manos a las rejas de protección de una ventana.
Los hechos se registraron supuestamente en la calle Descubrimiento de América Num. 14 de la Colonia América, lugar en el que se tomaron distintas imágenes del menor junto con su padre Carlos Damián Rojano López y su madre, que se asoman a la ventana.
Periodista acusa cateo de su casa por supuestos federales
Agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) irrumpieron en la vivienda del poeta y periodista cultural Javier Molina, donde derribaron una puerta para catear el domicilio por presunta búsqueda de droga, denunció el agraviado.
El escritor que reside en la ciudad de San Cristóbal de las Casas, dijo que los policías federales y el agente del Ministerio Público identificado como Miguel Zúñiga se retiraron del domicilio después de que revisaron la vivienda y no encontraron la supuesta droga.
Molina relató que el agente del Ministerio Público regresó luego al domicilio y le entregó la cantidad de mil pesos «para que arregle la puerta».
Le aseguró además que portaba una orden de cateo girada por un juez federal, pero no le exhibió ningún documento ni se lo dio a leer.
El agraviado denunció que el hecho violento ocurrió hacia las 6:30 horas del pasado lunes.
«Me despertaron fuertes golpes en la puerta de mi cuarto, al preguntar quién era, me contestaron que policías federales; nunca se identificaron pero iban uniformados. Eran cuatro más el agente del Ministerio Público», detalló.
Para llegar a su cuarto los uniformados derribaron la puerta de entrada, que está después de un patio, y una puerta más que abrieron sin tirarla hasta que llegaron al acceso de la habitación.
Molina comentó que los agentes tocaron la puerta al grito de: «Policía Federal, abran, abran».
El poeta de 71 años señaló que los policías le dijeron que vendía un tipo de droga, pero no le especificaron cuál de ellas.
Al agente del Ministerio Público le enseñé mi credencial de La Jornada y una revista, le expliqué mi trabajo; me dijo que me presentara a la oficina «para aclarar mi asunto», dijo.
Y que luego de algunos minutos el agente del Ministerio Público, acompañado de un informado, regresó y le dijo: «‘ya como humano le doy este dinero (mil pesos) para que arregle la puerta, y se retiraron».