La Dirección de Ecología atiende todas las denuncias que se reciben por probable contaminación auditiva, y se canalizan de inmediato para realizar la revisión, y en su caso, iniciar el procedimiento administrativo correspondiente porque, si son reincidentes, pueden recibir un apercibimiento o la clausura del establecimiento.
Alberto Echavarría Delgado, titular de la dependencia, informó que las revisiones se realizan de forma aleatoria, y principalmente en las avenidas Himalaya y Carranza.
Se da una atención oportuna a cada reporte que reciben en esta dirección, y se inicia el procedimiento con la visita al establecimiento para verificar, mediante un sonó-metro, que los niveles de ruido no excedan los marcados por la norma mexicana NOM-081-SEMARNAT-1994, que establece menor ruido antes de las 22:00 a 06:00 en zona comercial.
Posteriormente, y en caso que exista una violación a dicha norma, se les invita a los propietarios del establecimiento a respetar el máximo de decibeles permitido, pero en caso de existir una reincidencia, se inicia el procedimiento administrativo.
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