El Cabildo capitalino aprobó por unanimidad la creación de un Consejo Taurino con siete aficionados conocedores de la fiesta brava, quienes asesorarán al presidente municipal en la decisión de nombrar a los jueces de plaza y a fin de evitar que aquellos empresarios o toreros, que tienen un interés particular, sean quienes definan los triunfos y derrotas en las corridas de toros.
Eduardo Noyola Bernal, regidor presidente de la Comisión de Hacienda, dijo que las modificaciones obedecieron a una actualización al Reglamento Taurino que databa de 1992, a fin de garantizar mejor transparencia en la denominada “fiesta brava”.
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Detalló que las adecuaciones se habían pospuesto desde pasadas administraciones municipales, porque el Poder Legislativo no se había pronunciado a favor o en contra de una propuesta para prohibir o no la “fiesta taurina” en San Luis Potosí.
“La última revisión del reglamento taurino del municipio es de 1992 por lo que debió mejorarse. Se añadió un capitulo y ahora debe existir un Consejo Taurino conformado por siete aficionados conocedores de la fiesta brava, que no sean ganaderos, ni toreros o empresarios o todos aquellos quienes se benefician directamente de este evento”, abundó.
Los consejeros tendrán la facultad de asesorar al alcalde capitalino que es la máxima autoridad que nombra a los jueces de plaza y que es a su vez la máxima autoridad en la fiesta de toros.
Los consejeros que están por definirse serán propuestas a mutuo propio, “como bien pueden ser las propuestas de las Peñas Taurinas”.
El regidor priísta dijo que, sin embargo, a raíz de la actualización al reglamento taurino, “en materia de toros siempre habrá inconformidad de un lado o del otro.”