El autor mexicano presentó en Madrid el libro «Quinteto de Mo-gador», donde aborda la manera en la que el deseo profundo se vive en diversas culturas
Hasta en la cultura donde hay un sojuzgamiento más profundo, existe en las mujeres la inteligencia, una voluntad de afirmación, afirmó el escritor mexicano Alberto Ruy Sánchez, quien presentó en esta capital «Quinteto de Mogador».
En entrevista, afirmó que las mujeres presentan una voluntad de determinar ellas mismas, quiénes son, hacia dónde van.
«En todas las culturas existe este principio de emancipación individual, que para mí es el principio de indeterminación que yo exploro», anotó.
El mexicano presenta en España este compendio de cinco títulos que componen esta búsqueda poética del erotismo, con un eje.
Estos son: Nueve veces el asombro y cuatro puntos cardinales como los cuatro elementos de un microcosmos en explosión: «Los nombres del aire», «En los labios del agua», «Los jardines secretos de Mogador» y «La mano del fuego».
Consideró que el deseo profundo es liberador y eso funciona en todas las culturas y en cada cultura se viven determinaciones distintas, prohibiciones distintas, pero al mismo tiempo se prohibiciones que parecen no serlo, las del mercado.
Puso como ejemplo que mucha de la literatura que se dice erótica, sea una literatura «facilona, muy comercial», hace que la nueva prohibición sea encontrar la poesía del erotismo.
Ruy Sánchez se ha dedicado 20 años a escuchar historias de mujeres y hombres deseantes y a hacer con ellas la composición de un conjunto de libros que son exploración, invocación, poesía y finalmente reflexión sobre el deseo y sus equívocos.
Cada uno de ellos ha sido premiado en diferentes continentes y varias veces traducido.
El autor cultiva el placer de contar historias, de viajar para hacerlo y de seguir escuchando. Se ha vuelto un lector y conferencista nómada.
De su vida universitaria en París, donde fue alumno de Roland Barthes y de Gilles Deleuze, conserva el inmenso placer por tratar de comprender y la práctica gozosa del ensayo. Además, fue colaborador cercano de Octavio Paz (1914-1998).
Cree en la edición como una pasión compartida, alrededor de la multipremiada revista «Artes de México» , que resucitó y dirige desde 1988; oficio que le fue premiado en 2006 por la industria editorial de su país con la más alta distinción que se otorga a la carrera de un editor.
Entre otros reconocimientos a su obra literaria fue nombrado Oficial de la Orden de las Artes y de las Letras por el gobierno de Francia. Y el de Kentucky lo hizo Capitán Honorario del barco de vapor más antiguo del río Mississippi: «La Belle de Louisville».
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