La milicia talibán afgana liberó a 27 de los 30 agentes de policía que secuestró en el transcurso de un combate ocurrido el pasado miércoles en el distrito de Yamgán, en el norte del país centroasiático, informó una fuente policial.
Los policías fueron liberados gracias a la mediación de líderes locales, explicó el jefe de Policía de la provincia de Badajshan, Fazludín Ayar, que no desveló más detalles sobre el acuerdo que condujo a la liberación.
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“Los talibanes aún tienen en su poder a 3 policías, que son también personas normales”, añadió Ayar.
Los agentes fueron capturados durante un choque en Yamgán en el que murieron otros seis miembros de las fuerzas de seguridad, y los secuestrados fueron llevados por los insurgentes a una cueva, según explicó entonces el propio jefe de policía.
Rodeado de altas montañas, Yamgán se halla en la remota provincia de Badajshan pero muy cerca de la frontera con la demarcación vecina de Nuristán, donde los insurgentes tienen una notable presencia.
Las autoridades lanzaron una operación contra la insurgencia talibán, que se había apoderado del distrito, y lograron ayer recuperar el control de la zona tras duros combates que costaron la vida, según la versión oficial, a ocho policías y once talibanes.
Estos choques se producen en plena campaña de primavera de los talibanes, que fue anunciada a comienzos de mes por el aparato de propaganda de la insurgencia y que pretende “eliminar invasores extranjeros” pero “sin causar daño a los civiles”.
La recurrente ofensiva talibán coincide este año con el proceso de elecciones presidenciales en el país, cuya primera vuelta se celebró el pasado 5 de abril, mientras que la segunda está prevista para el próximo 14 de junio.
Las tropas de la OTAN desplegadas en Afganistán están en la fase final de su retirada del país centroasiático y transfieren gradualmente el control de la seguridad a la policía y al Ejército locales.
El repliegue aliado concluirá el próximo diciembre, si se cumplen los plazos previstos, pero los miembros de la Alianza Atlántica sopesas mantener cierta presencia militar en suelo afgano más allá de esa fecha.