Elecciones amenazadas en este de Ucrania

Los insurgentes prorrusos han impedido que por lo menos la mitad de los distritos electorales en el este de Ucrania se preparen para los comicios presidenciales del domingo, dijo un funcionario ucraniano.

Volodymyr Hrinyak, jefe del departamento de seguridad pública del Ministerio del Interior ucraniano, dijo el sábado que 17 de las 34 comisiones electorales de distrito en las regiones de Donetsk y Lugansk no funcionan porque sus oficinas fueron ocupadas o bloqueadas por hombres armados. El informe de Hrinyak fue difundido por la agencia noticiosa Interfax.

Los insurgentes han controlado durante semanas partes de Ucrania. Tras su declaración de independencia a principios de este mes, prometieron torpedear la votación, que consideran una elección en «un país vecino» .

Siguen desafiantes aunque el presidente ruso Vladimir Putin dijo el viernes que está dispuesto a trabajar con el triunfador de los comicios.

Por la presidencia ucraniana compiten 21 candidatos. Los sondeos de opinión indican que el multimillonario fabricante de golosinas Petro Poroshenko lleva una ventaja importante, pero sin llegar a la mayoría absoluta para triunfar en la primera ronda. Su más inmediata rival es la ex primera ministra Yulia Tymoshenko, aunque a distancia considerable.

Casi todos los sondeos indican que Poroshenko ganaría una segunda ronda, que tendría lugar el 15 de junio.

Hubo combates el viernes entre los separatistas partidarios de Rusia y las fuerzas gubernamentales en el este de Ucrania, mientras Kiev continuó su ofensiva para frenar el levantamiento.

Los reporteros de The Associated Press vieron los cadáveres de dos soldados ucranianos cerca de la población de Karlivka y otro cerca de un puesto de control insurgente, ambos en la región de Donetsk. Un líder rebelde dijo que otras 16 personas perecieron el viernes en combates en esa zona – 10 soldados, cuatro insurgentes y dos civiles – pero no hubo forma de verificar la información.

En Kiev, el ministerio de Defensa dijo que 20 insurgentes fueron muertos en un ataque el jueves contra un convoy de fuerzas gubernamentales lanzado por unos 500 insurgentes, la mayor emboscada de este tipo ocurrida hasta ahora. El incidente no pudo ser confirmado independientemente y no está claro cómo un ataque tan notable en una región muy poblada no fue reportado por más de un día.