Este prestigioso galardón llega el mismo año en que se celebran los 50 años del gran personaje de historieta.
Quino dibujó a Mafalda durante nueve años, entre 1964 y 1973. “Pero nunca terminé de aprender a dibujarla; tenía que calcarla”, contó hace poco.
Mafalda es la tira latinoamericana más vendida en el planeta y en las cinco décadas que cumple no perdió vigencia: siguen en pie todos (o casi todos) los temas contra los que se indignaba la niña contestataria. Después de Mafalda, Quino nunca volvió a tener un personaje fijo de historieta. “La dibujé nueve años, hace 41, y sigue vigente. Qué plomo, ¿no?”, se decía él mismo en la apertura de la 40ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, mientras confirmaba que le tiene mucho cariño a Mafalda por todo lo que le ha dado en su trayectoria.
Año de reconocimientos
“Quino alcanzó fama internacional con la creación del universo de Mafalda, una niña que percibe la complejidad del mundo desde la sencillez de los ojos infantiles. Mafalda, la principal protagonista del trabajo creativo de Quino, es inteligente, irónica, inconformista, contestataria y sensible. Sueña con un mundo más digno, justo y respetuoso con los derechos humanos.
“Al cumplirse el 50 aniversario del nacimiento de Mafalda, los lúcidos mensajes de Quino siguen vigentes por haber combinado con sabiduría la simplicidad en el trazo del dibujo con la profundidad de su pensamiento”.
Así fundamentó el jurado las razones por la que Quino ganó el premio 2014.
La presencia de Quino entre los ganadores del Príncipe de Asturias pone nuevamente a Argentina en la palestra de este premio. En ocasiones anteriores lo recibieron personajes como el físico y filósofo Mario Bunge, y el afamado director de orquesta Daniel BarenboimPero no es el primer reconocimiento que recibió el argentino en el año. En Francia, a Quino le fue otorgada la Legión de Honor.
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