La secretaria de Salud de México, Mercedes Juan, advirtió hoy ante la Asamblea Mundial de la Salud que el cambio climático representa una amenaza para la salud pública.
La funcionaria mexicana participó este martes en la sede europea de Naciones Unidas en la plenaria de la citada Asamblea, integrada por representantes de 194 países, donde destacó la relación entre clima y salud, “tema fundamental que impacta todas las dimensiones de vida.” ó “un viraje en la manera en la que se debe responder, buscando siempre la protección de la población”, y recordó que el cambio climático influye en el aire limpio, agua potable, alimentos suficientes, vivienda segura, y particularmente, en los fenómenos hidrometeorológicos.
¡SIGUE NUESTRO MINUTO A MINUTO! Y ENTÉRATE DE LAS NOTICIAS MÁS RELEVANTES DEL DÍA
En México se manifiesta por el incremento en la frecuencia e intensidad de huracanes e inundaciones, con mucha población expuesta así como en el aumento de los riesgos para la dispersión de enfermedades transmitidas por vector, como el dengue, explicó.
Añadió que México “ha puesto en marcha la Estrategia Nacional de Acción Climática para hacer frente a los impactos de este fenómeno” ó que el gobierno mexicano ha sido “proactivo no solamente en materia de salud, sino que se ha comprometido a que todos los sectores involucrados en la emisión de gases de efecto invernadero reduzcan sus emisiones conforme a los compromisos que México ha adquirido en el ámbito internacional.”
Citó como ejemplo de esos compromisos la incorporación reciente a la administración pública, como eje de estas acciones, del nuevo Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático.
La funcionaria mexicana enfatizó que recientemente se publicó la Ley en esa materia y fue aprobado el Programa Especial de Cambio Climático 2013-2018, que incluye medidas de adaptación en salud.
Llamó a los Estados Miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a consolidar las acciones que enfrentan los efectos en la salud por el cambio climático, incluido el uso del Reglamento Sanitario Internacional, como instrumento clave para la comunicación oportuna de riesgos.
Por otra parte, Juan también se refirió a la puesta en marcha el pasado octubre de la Estrategia Nacional para la Prevención y Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, problema complejo que demanda respuesta de los sectores público, privado y social, así como del individuo.
Dijo que esa estrategia es un paradigma de la salud que la coloca como eje de una política de Estado y, que desde el liderazgo del sector salud, articula y promueve la participación multisectorial.