Confirman que Pablo VI será beatificado el 19 de octubre

La Congregación para las Causas de los Santos ha aprobado la existencia de un milagro por intercesión del papa Pablo VI que servirá para su beatificación, según informó hoy la agencia italiana ANSA.
La beatificación de Giovanni Battista Montini, el Papa que concluyó el Concilio Vaticano II, será el 19 de octubre, cuando termine el Sínodo de los obispos sobre la familia previsto en ese mes, según la fuente.
El papa Francisco  confirmó hoy que el papa Pablo VI será beatificado el próximo 19 de octubre, cuando termine el Sínodo de los obispos sobre la familia previsto en ese mes, informó la Santa Sede en su portal de noticias.
La beatificación de Giovanni Battista Montini, el pontífice que concluyó el Concilio Vaticano II, fue anunciada esta semana por medios italianos, aunque faltaba la aprobación del decreto por parte del papa Francisco.
Según explicó la Santa Sede en su portal oficial, Bergoglio se reunió ayer en privado con el cardinal Angelo Amato, perfecto de la Congregación para las Causas de los Santos, para autorizar formalmente la existencia de un milagro realizado por Pablo VI.
Pero la joven quiso concluir el embarazo encomendándose a la intercesión de Pablo VI.
Según dijo Marrazzo en 2012 a Radio Vaticano, «el niño nació sin problemas» y los médicos consideraron su nacimiento «un hecho verdaderamente extraordinario y sobrenatural».
El papa Benedicto XVI firmó, el 20 de diciembre de 2012, el decreto de «virtudes heroicas» de Pablo VI con el que se le declaró «venerable» y continuó el proceso para su beatificación.
Sanación de feto
Algunos medios italianos ya habían informado previamente de que el milagro elegido para Pablo VI era la «sanación» de un feto en 2001 en Estados Unidos, propuesto por el postulador de este proceso, Antonio Marrazzo.
El caso se refiere a la historia de una mujer que durante el embarazo descubrió un grave problema cerebral del feto y a la que los médicos aconsejaron como posible solución el aborto, pero la joven se opuso y quiso concluir el embarazo encomendándose a la intercesión de Pablo VI.