Madres de familia son verdaderas mártires

En la víspera de la celebración del Día de las Madres, la Arquidió-cesis de San Luis Potosí, a través de su portavoz, Juan Jesús Priego Rivera, llamó a la reflexión sobre el importante papel que juegan la las madres de familia en la sociedad.
Recordó que en estos tiempos difíciles, de acuerdo con las estadísticas oficiales, tres de cada 10 madres de familia se encuentran sosteniendo sus respectivos hogares, por tratarse de madres solteras, divorciadas, separadas o viudas, quienes hacen el mejor de sus esfuerzos para sostener a sus hijos, educarlos, alimentarlos, vestirlos y atenderlos en sus enfermedades y padecimientos.
Aseguró que, en ocasiones, las madres de familia actúan como verdaderas mártires que portan a sus hijos valores, ternura y amor incondicional. No obstante, en la sociedad actual, la madre ha quedado como un cero a la izquierda, sin ser valoradas, en ocasiones, ni por sus propios hijos; sin embargo, recordó, en alguna ocasión un sacerdote me dijo a ese respecto:
—Si una mujer tiene once hijos, ella verá qué hacer para sacarlos adelante pero, cuando estos, los hijos, crecen, estos no saben cómo sacar a su madre adelante”.
Y es que no se ha terminado de reconocer su enorme valor, no se ha querido reconocer que el amor que ella alienta es incondicional y que está dispuesta a cualquier sacrificio por sus hijos. Es por eso que la Iglesia ora permanentemente por ellas, permanentemente les reconoce su valía y sus aportaciones a la familia y a la sociedad.
Pedimos que nos e vea desbordada por los problemas en la familia, reconocemos su valor y sabemos que nadie será capaz de pagarle por sus sacrificios, sólo Dios.
Recordó el Cuarto Mandamiento de la Ley de Dios que reza: “Honrarás a tu padre y a tu madre” y, en ese sentido llamó a reflexionar sobre la necesidad de tratarlas con deferencia, con respeto, con toda consideración, porque para los hijos los padres y las madres deben ser sagrados.
El mejor regalo que podrán tener las mamás en su día será el del amor, el respeto, la consideración y el cabal reconocimiento de sus hijos, no un artículo de comercio, sino una muestra de cariño y de consideración.
El mejor regalo de una madre –abundó—, es el de tener unos hijos “a su estilo”.
Mientras tanto, y en el marco de la celebración del Día de la Madre, crecen las disputas por los espacios públicos, particularmente entre los comerciantes formales e informales.