Los casos de violencia física, verbal y económica en contra de mujeres registraron un incremento notable durante la pasada temporada vacacional, por ello se duplicó el trabajo que realiza la Unidad Especializada de la Policía para la Atención de la Violencia Familiar y de Género, al atender un mayor número de reportes, informó lo anterior su titular, el comandante Maximino Oros Gutiérrez.
Dicho problema a varios factores, uno de ellos, posiblemente el principal; la ingesta de alcohol principalmente los fines de semana, los hombres al sentirse sostenes de la casa incurren en primer lugar en violencia verbal contra las esposas incluso hijos para luego pasar a los golpes.
Explicó el funcionario municipal que en materia de disposiciones ante el Agente del Ministerio Público anteriormente se reportaban hasta 13 casos mensualmente, en esta ocasión se elevó hasta 29.Así mismo informó que el trabajo de la UAVI ha permitido recuperar hasta 10 menores de edad por mes, los cuáles son abandonados por sus padres o familiares.
El comandante Maximino Oros, exhortó a seguir promoviendo la cultura de la denuncia mediante el número de atención 324-71-47, las 24 horas del día.
La queja más recurrente va en el sentido de que al iniciar una discusión verbal entre pareja se da la situación de puñetazos e intentos de ahorcamientos o asfixia. Curiosamente son “deportistas”, hombres que practican futbol o béisbol llanero quienes incurren más en este fenómeno, luego de regresar alcoholizados a sus hogares.
Hasta hoy la UAVI no tiene conocimiento de agresiones físicas que hayan requerido intervención hospitalaria.
Por agredir a su mujer lo detuvieron
Fue capturado Víctor Manuel, de 27 años de edad, luego de que su esposa, cansada de la situación de agresiones recurrentes que vivía junto a sus pequeños hijos.
Lo demandó ante el representante social acusándolo de golpearla y acusarla de engañarlo con otro hombre.
La afectada, quien fue identificada como Rocío N., compareció ante el Agente del Ministerio Público el 15 de abril del año pasado, para demandar a Víctor de haberla golpeado una vez más a siete años de casado.
En su comparecencia ante la representación social, la afectada explicó que las agresiones tanto físicas y verbales iniciaron hace aproximadamente un año, luego de que ella decidiera trabajar.
Para ayudarle en la manutención de sus dos hijos de 7 y 3 años de edad, ya que con lo poco que él le proporciona, no les alcanzaba para todas las necesidades del hogar. Al parecer eso molestó al tipo quien desde entonces, con frecuencia la insultaba diciéndole que andaba con otro hombre y tachándola de mujer alegre, pero la situación se agravó al también ser objeto de brutales golpizas aun frente a sus hijos, quienes asustados, llorando le pedían que no golpeara a su madre.
Y, según declaró la denunciante, fue precisamente el día que lo demandó, que recibió el último golpe que le dejó el rostro amoratado, por que pidió el apoyo de las autoridades y se regresó a vivir con sus padres.
En consecuencia a la denuncia, las diligencias se consignaron al juzgado Cuarto del Ramo Penal de donde se ordenó la aprehensión del indiciado que fue localizado cerca de su domicilio en la Unidad Habitacional Ciudad 2000, en la delegación de Villa de Pozos.
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