Otra vez el centralismo

Hoy el país se encuentra inmerso en una etapa de reformas constitucionales y hay muchos que reconocen este hecho como una gran innovación de la vida política de nuestro país, pero recordando cómo se ha integrado la vida del México independiente por ejemplo al igual que hoy nuestra Constitución y sus leyes y reglamentos, tienen que adaptarse a lo que la federación disponga.
De esta manera los antecedentes y fundamentos de la Primera Constitución del Estado de S.L.P., son los textos conocidos como Acta Constitutiva de la Federación Mexicana del 31 de Enero de 1824 y la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos también de 1824.
Esto al igual que entonces nos lleva en realidad a no ser un estado libre, soberano e independiente, sino a estar sujetos a un gobierno centralista que define la dinámica política, económica y de todo tipo de la federación; cada vez más la centralización del poder en México se acentúa sobre todo porque tiene como punto de apoyo el manejo discrecional de los recursos económicos del país.
Por ejemplo, hay estados como Nuevo León o Chihuahua cuya inconformidad justificada se basa en su aportación al Producto Interno Bruto y sus niveles de impuestos que cubren a la federación.
Estos recursos provenientes tanto de los productos como de las aportaciones económicas de los impuestos, se distribuyen de manera preferencial en zonas depauperadas que muy poco aportan a la federación de los estados mexicanos tanto en producción como en impuestos.
De esta manera los 7.7 billones de pesos anunciados para infraestructura en los próximos años, beneficiarán preponderadamente a muchos estados que no producen y que no se esfuerzan por producir a pesar de tener en su entorno una enorme cantidad de materias primas.
Pero el problema de la centralización va más allá que la mera distribución de recursos federales, hoy se vislumbra que afectará los procesos electorales del 2015 en el que nueve estados de la república renovarán gubernaturas y 17 renovarán congresos locales.
El pasado día 30 se dio a conocer que no estaba concluida la reforma electoral. La llamada fracción parlamentaria del PAN aprovechará el receso para dedicarse a la renovación de su dirigencia nacional.
Pero que en realidad todos estos desajustes legislativos centralizados en el Congreso de la Unión, afectarán de manera tajante los procesos electorales en San Luis Potosí, a esto se debe de incluir la implementación institucional del INE sin un marco jurídico claro de referencia para su operación, por lo que en el mejor de los casos tendrán que echar mano de leyes y reglamentos que hoy se mencionan como obsoletos.
Quienes se dedican a la actividad política, aprovecharán estos vacíos jurídicos para armar los próximos procesos a su conveniencia como lo son las precampañas adelantadas, las precampañas disimuladas, el uso y abuso de la imagen pública y de los recursos públicos también.
Al volver a esta sujeción centralista pueden surgir situaciones en dos vertientes:
Una, que ciudadanos y partidos políticos se revelen en contra de esta ineptitud centralista y dos, que ciudadanos y partidos políticos se abandonen a la responsabilidad y resoluciones centralizadas en las funciones plenipotenciarias del INE.
Por lo que será necesario como ciudadanos estar en estado de alerta, por lo que se pueda disponer desde la capital de la república como ha venido sucediendo durante los casi cien años del México Independiente.