El presidente Joe Biden dio hoy las primeras señales de la política que planea adoptar para Cuba, a raíz de las sorpresivas protestas ciudadanas contra el régimen comunista de la isla.
Estados Unidos evalúa aumentar el personal de su embajada en La Habana y revisar la política de remesas a la isla, anunció este martes un portavoz del gobierno.
Las medidas se aplicarían como forma de apoyar al pueblo cubano en sus «legítimas aspiraciones» democráticas, agregó el vocero Ned Price, del Departamento de Estado.
«Estamos revisando nuestros planes para aumentar la dotación de personal en nuestra embajada en La Habana para facilitar las actividades consulares», declaró el funcionario.
Agregó que se conformará un grupo de trabajo de remesas para identificar las formas más efectivas de hacer llegarlas directamente a manos del pueblo cubano.