Monedas de plata chinas

Monedas de plata chinas, testigos de lazos históricos con México

  • 2021 es el quinto año en que el RMB forma parte de la cesta de Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Al ver por primera vez la enorme escultura de una moneda que se erige en Jinggangshan, en la provincia oriental china de Jiangxi, el profesor mexicano Diego Barroso quedó sorprendido.

La moneda, fabricada por la Casa de la Moneda del Ejército Rojo durante la Revolución China, está acuñada con la imagen de un águila posada sobre un cactus que crece entre las rocas de un lago y que lleva una serpiente en la boca y un carácter chino grabado en las alas. La imagen es bastante similar al escudo nacional de México.

Para descubrir la conexión entre las monedas de los dos países, Barroso, que es profesor de idiomas en Shanghai, viajó hasta Jinggangshan, considerada la «cuna» de la Revolución China.

El modelo mexicano

En mayo de 1928, en un intento por consolidar y desarrollar bases revolucionarias, Mao Zedong (1893-1976) y Zhu De (1886-1976), con su ejército, construyeron la Casa de la Moneda del Ejército Rojo en Jinggangshan, tomando como modelo la moneda de plata mexicana para producir el suyo propio.

Además, los trabajadores grababan las monedas con el carácter «gong», que significa «obreros, campesinos y soldados».

Wen Shangqing, profesor de la Academia de Liderazgo Ejecutivo Jinggangshan de China y experto en historia económica del Partido Comunista de China (PCCh), le explicó a Barroso que «durante el período tardío de la dinastía Qing y el régimen del Kuomintang, la moneda de plata mexicana fue una de las divisas extranjeras más utilizadas en el sur y el centro de China».

Según Javier Ocampo, un cuentista de Taxco, estado de Guerrero de México, desde la época colonial en México hubo grandes plateros que hacían los cuños, o sea los moldes que se utilizaban para imprimir y acuñar las monedas.

«Estos cuños seguramente fueron llevados también a otros países, como el caso de China», dijo Ocampo. Tras la apertura de la Casa de la Moneda, Mao hizo hincapié en la finura y la calidad de las monedas y pidió a sus trabajadores que utilizaran plata fina como materia prima, recordó Li Haiquan, actual responsable de la Casa de la Moneda del Ejército Rojo, restaurada en 1998.

La Casa de la Moneda pronto pasó de tener pocos trabajadores a decenas, con capacidad de producir en cada tirada más de 400 monedas en una estufa, lo que generó un amplio apoyo y confianza populares en las áreas de la base de la revolución en Jinggangshan.
Heredado por generaciones.

La Casa de la Moneda fabricó más de 10.000 monedas en más de seis meses desde su entrada en funcionamiento, y su trabajo llegó a los condados de Jiangxi a lo largo de los límites provinciales. Fue destruida a finales de enero de 1929 en los ataques enemigos.

Jin Jiadong, de 70 años y fundador del Museo de Monedas Jinjiufu, ubicado en Nanchang, capital de la provincia de Jiangxi, es uno de los pocos que posee una pieza producida por la Casa de la Moneda en esos años.

Hace 93 años, dos tíos de Jin se unieron al Ejército Rojo y murieron en sendas batallas.

«La moneda fue entregada por el ejército para expresar el pésame a mi familia», recordó Jin, y agregó que la moneda era un objeto muy apreciado por los miembros de su familia, que la atesoraban escondida en un espacio entre los ladrillos de su antigua casa.

La fuerza que guiaba a la familia de Jin a conservar la pieza le inspiró a poner en marcha el museo, que recolecta artículos relacionados con la moneda.

Wei Xiuchang, funcionario del Departamento de Supervisión Financiera local, dijo que la Casa de la Moneda fue un esfuerzo significativo y sentó las bases para la emisión de la actual moneda china, el renminbi (RMB).