- Guarden las escobas en el armario porque los Tigres de Quintana Roo sacaron la garra en la que fuera su casa por casi 50 años, la Ciudad de México.
El conjunto felino se aferró a no ser barridos por los Diablos Rojos y no solo los vencieron en el último duelo de la Guerra de Guerras sino que lo hicieron por blanqueada de 6-0.
El conjunto de Miguel Ojeda lució inoperante con el bat y su ofensiva saltó al diamante con la pólvora mojada. La serpentina de los de Cancún dominó a los Pingos, quienes apenas registraron cinco imparables. Felipe Arredondo se adjudicó el triunfo en la lomita con cinco innings de trabajo y dos ‘chocolates’ en su registro.
Del lado de los escarlatas los lanzadores tuvieron una mala tarde, comenzando por Brandon Cumpton quien permitió las primeras tres carreras del encuentro y dejó la casa llevan para el relevo De Francisco Villegas, quien no pudo hacer nada para evitar una tercia más de carreras a favor de los Tigres.
El estadounidense se llevó las seis carreras recibidas a su registro personal. José Lizárraga encabezó a la ofensiva felina con tres carreras impulsadas. La primera con una línea al jardín izquierdo que Julián Ornelas no pudo alcanzar y que llevó a Alex Robles a la registradora.
El siguiente par de producidas se las adjudicó con un ‘machucón’ al mismo jardín izquierdo que empujo a Erick Migueles y Manuel Orduño al home.
Este fue el décimo triunfo del equipo de Quintana Roo en lo que va de la temporada y en la siguiente semana buscará salir del sótano de la Zona Sur, misma en donde Diablos es líder.