Inesperadas maneras de ayudar a salvar el planeta del cambio climático

Inesperadas maneras de ayudar a salvar el planeta del cambio climático

  • Desde «cazafantasmas» de gases de efecto invernadero hasta la producción de súper variaciones de arroz, ninguna idea es descartada cuando se trata de combatir el cambio climático.

Cómo revertir el cambio climático es posiblemente el mayor reto jamás enfrentado por la humanidad. Afortunadamente, hay increíbles cerebros por todo el mundo abordando el problema desde todos los ángulos. Aquí te presentamos seis de las mejores (y más inusuales) soluciones de la serie de la BBC «39 maneras de salvar el planeta».

1. Educar a las niñas

Mejorar la educación en todo el mundo podría parecer una propuesta obvia. Pero aumentar en particular el acceso de las niñas a la educación no sólo trae beneficios sociales y económicos, también ayuda a combatir el cambio climático.

Esto se debe en parte porque las jóvenes empiezan a tener hijos más tarde si permanecen en la escuela más tiempo. Si todas las niñas completaran la escuela secundaria, para 2050 habría 840 millones de personas menos en el mundo de lo que actualmente se pronostica.

Es cierto que cuando se trata del cambio climático, el tema de la población puede ser polémico -las personas en países más pobres dejan una huella de carbono diminuta en comparación con las de los países ricos. Pero con los recursos del planeta bajo presión, el crecimiento demográfico es un asunto importante.

No obstante, la educación de las niñas es mucho más que una estadística poblacional. Las mujeres que llegan a participar en el trabajo, los negocios y la política podrían ser el secreto para impulsar la protección del clima.

Los estudios sugieren que poniendo más mujeres a cargo podría resultar en mejores políticas climáticas. ¿Cómo? Las mujeres líderes tienden a poner atención a los consejos científicos, como se ha evidenciado en la respuesta global contra la pandemia de coronavirus.

2. Bambú: no es sólo alimento de pandas

El bambú es la planta que crece más rápido en el mundo. Puede crecer hasta un metro por día y absorbe el carbono de la atmósfera mucho más rápido que otros árboles.

El bambú manipulado con ingeniería puede ser más fuerte que el acero. Todas estas cualidades lo hacen un material súper ecológico para la construcción de muebles y edificios.

En China, el bambú solía considerarse «la madera de los pobres», pero ahora se está transformando su imagen. Productos basados en bambú pueden servir como una alternativa sustentable y baja en carbono al acero, el PVC, el aluminio y el concreto Plantar bambú también tiene otros beneficios ecológicos: tiende a ser resistente a las plagas así como mejorar la fertilidad del suelo, evitar la erosión y reducir el riesgo de inundación.

Arief Rabik administra la Fundación Ambiental de Bambú en Indonesia, una organización caritativa dedicada a recuperar tierra y atrapar carbono con su programa de mil «aldeas de bambú». Cada asentamiento estará rodeado de unos 20 kilómetros cuadrados de bosque de bambú, mezclado con cultivos y ganado. Rabik busca expandir la idea a nueve países más.

3. Leyes para combatir a los contaminadores

Cada vez más abogados defensores del clima están recurriendo al fuerte brazo de la ley para combatir el cambio climático. De hecho, el sistema legal es una de las armas más poderosas que se tienen a disposición para mantener control sobre las compañías y gobiernos contaminadores. Hace poco, un tribunal en Países Bajos determinó que la gigante petrolera Shell está legalmente obligada a reducir sus emisiones y alinear sus políticas a las metas del Acuerdo de París sobre el clima, un caso que sentó un precedente.

Y no se trata simplemente de las leyes ambientales que vienen al rescate. Los abogados astutos se están volviendo creativos, amparándose en leyes de derechos humanos, leyes laborales y hasta leyes empresariales para combatir el cambio climático.

En 2020, un grupo inversionista que poseía apenas US$35 en activos logró frenar la construcción de una planta de carbón en Polonia.

¿Cómo? El grupo ambientalista ClientEarth usó sus activos en la empresa de energía polaca Enea y la potestad de la ley corporativa para impugnar la decisión de la compañía de respaldar la construcción de la planta de energía de carbón Ostroleka C. El tribunal falló que la apertura de la nueva planta de carbón simplemente era ilegal y un mal negocio.

4. Al acecho de refrigeradores gaseosos

Toda nevera, refrigerador, congelador o aparato de aire acondicionado contiene refrigerantes químicos -como los hidrofluorocarburos (HFC). Pero el poder de enfriamiento que hace a los HFC fantásticos para las neveras también los hace nefastos para el mundo.

Es más, los HFC son gases de invernadero tan potentes -mucho más que el CO2- que en 2017 los líderes mundiales acordaron eliminarlos gradualmente. Se vaticina que esa sola medida reducirá el calentamiento global por 0,5 grados.

Sin embargo, el número de neveras y unidades de aire acondicionado en existencia es masivo. Como la mayoría de las emisiones refrigerantes suceden al fin de la vida útil de estos aparatos, eliminarlos de una manera segura es crítico.