- El colapso de un teleférico en Italia le costó la vida a 14 de 15 pasajeros; un niño de 5 años fue el único sobreviviente y recientemente despertó.
La semana pasada nos dejó muy consternados la noticia de que un teleférico se desplomó en Italia, tragedia que le quitó la vida a 14 de los 15 pasajeros que viajaban en la cabina. El único sobreviviente fue un niño de sólo cinco años de edad, quien recientemente despertó en el hospital y conmovió a todo mundo con sus primeras reacciones.
Se trata de Eitan Biran, quien resultó gravemente lesionado luego de que la cabina del teleférico donde viajaba con su familia el domingo pasado, cayera al vacío en el monte Mottarone, en la ciudad de Piamonte, al norte de Italia.
Eitan fue uno de los dos menores que sobrevivieron a la caída inicial y fueron trasladados en helicóptero a un hospital de Turín. Sin embargo, ambos se encontraban heridos de gravedad y el otro niño, de nueve años, murió horas después del accidente.
Eso convirtió al pequeño Eitan en el único sobreviviente de la tragedia, lo que ha provocado que medios italianos, como Il Giornale D’Italia, le den seguimiento a su estado de salud. El pequeño recién despertó, luego de estar varios días en terapia intensiva, y ese mismo medio reveló sus primeras palabras.
“Hola tía, ¿por qué estamos en el hospital? ¿Dónde están mamá y papá?”, fueron las primeras preguntas que hizo el niño al abrir los ojos por primera vez desde la caída del teleférico… “Me duele la garganta”. Eitan se encuentra internado en el hospital infantil Regina Margherita, en Turín.
El niño de cinco años perdió a sus padres, a su hermano de sólo dos años y a su abuelo tras lo sucedido en el teleférico. La familia era de origen israelí y vivían en la provincia de Pavía, cuya comunidad ya espera el regreso del pequeño para brindarle todo el apoyo posible.
“Estamos abrumados por lo que ha sucedido. Hemos pedido a todos los padres de nuestra escuela que estén cerca del niño israelí con su oración. Hoy oramos por él en todo nuestro Instituto”, declaró la Madre Paola Canziani, directora del Instituto donde acudía el menor en Pavía “Le pedimos a Dios que le haga sentir su abrazo, como lo hizo su padre para protegerlo durante esta terrible tragedia”.