QUIJOTE

Desempleo y hambruna en 2021

  • El gobierno federal y del estado han establecido una enorme brecha entre las relaciones sociológicas, del campo y la ciudad, tanto en la cadena productiva como en el aspecto de desarrollo social en términos generales.

Tal pareciera que la parte oficial busca una separación antropológicamente degradante: mientras que al campesino se le apoya con diversos programas, tanto en especie como en efectivo por diversas razones, por ejemplo las de tipo climatológico y aclaro, que si lo merecen, pero también la gente pobre de las ciudades que es un número mayor que en el campo, padecen con las situaciones climáticas porque si hay exceso de agua, se inundan sus viviendas y se derrumban sus precarias construcciones.
Lo mismo si es época de sequía sufren igual o más que la gente del campo por conseguir siquiera agua para beber; aún sin embargo, a la gente del campo el gobierno federal le destina miles de millones de pesos a fondo perdido, que claro está, la mayor cantidad se queda en las manos de la múltiples organizaciones “representantes” de los campesinos. Los habitantes de la ciudad carecen de estas prerrogativas económicas y en especie.
Aunque lamentablemente existen algunos vivales que con el pretexto de ostentar un cargo público como el de presidentes municipales o diputados federales o locales quieren hacerse pasar por “luchadores sociales” que inventan asociaciones, grupos, como el de los gallardistas pero que en sí, no hay mayor apoyo oficial para la gente pobre de las ciudades. Además de utilizar sus datos a sus espaldas para integrarlos a su partido político, el PVEM.
El 2021 es un año que ya se ha dicho de manera formal y bien explicada por que habrá escasez de alimentos en todo México y habrá de escasez de agua, sobre todo en la Mesa Central y del Norte de nuestro país.
Por lo que se exige que se modifiquen las políticas de distribución de agua potable como lo es el acto populista de establecer supuestas purificadoras de agua y que de inmediato se inicie el cambio de tubería por la que se desperdicia más del 40% del agua que se distribuye; kilómetro de tubería que se avance, es un kilómetro que ya no se perderá el agua.
Es necesario empezar hoy mismo con este programa.
Pero también por otra parte es sumamente importante que el propio ayuntamiento establezca con parámetros matemáticos una red bien completa de tiendas de venta de productos alimenticios a precios de costo y no repartir costosas despensas con productos caducos que solamente sirven para hacer campañas populistas.
Alejándose de presiones políticas, de preferencias grupales, se establezca esta red a través de la cual se pongan a la venta productos elementales para la alimentación de la familia como lo es el fríjol, el maíz, la leche de LICONSA, harinas de trigo, huevo, aceite, arroz y algunos otros productos para el aseo personal y doméstico de los que se fabrican a muy bajo costo localmente en nuestra ciudad.
Es indispensable que el ayuntamiento establezca por una parte, las necesidades reales de la gente que gane menos de dos salarios mínimos al día y por otro lado, que establezca contacto con la Secretaría de Agricultura para adquirir los productos agrícolas indispensables subsidiados o al más bajo precio, estableciendo simultáneamente a través del Congreso del Estado sanciones extremadamente drásticas para quien haga mal uso de estos productos, ya sea como empleado público, acaparadores o directamente consumidores, porque es necesario establecer medidas disciplinarias para ir acabando con la corrupción que ha sido el más grande mal al que se enfrenta México.
Este proyecto debe de iniciarse hoy mismo porque así podremos evitar la sed y la hambruna que se ha pronosticado para este año.