Dron armado golpea cerca de base de EEUU en el norte de Irak

Al menos un cohete fue lanzado contra el aeropuerto de Erbil, la capital del Kurdistán iraquí, donde están apostados soldados estadounidenses, según informes.
Funcionarios kurdos antiterroristas han reportado este miércoles una fuerte explosión como consecuencia de un ataque lanzado contra el aeropuerto de Erbil, donde están desplegados soldados estadounidenses.
Según ha informado el canal de Telegram Saberin News, columnas de humo se elevaban desde la base estadounidense cercana al aeropuerto, mientras que las carreteras que conducen al consulado de EE.UU. en Erbil y al aeropuerto de la ciudad han sido cerradas. Varias imágenes y vídeos publicados también muestran un incendio en la sección militar del aeropuerto de Erbil, que en realidad es la base y ubicación de las fuerzas estadounidenses.
Por su parte, el Ministerio del Interior del gobierno regional del Kurdistán iraquí (KRG, por sus siglas en inglés) ha subrayado que el ataque fue llevado a cabo por un avión no tripulado (dron) armado con “trampas explosivas” y tuvo como objetivo un complejo militar estadounidense en el aeropuerto de Erbil.
Antes de esta declaración de la Cartera iraquí, la Unidad contra el Terrorismo de la Región del Kurdistán había informado que el aeropuerto había sido golpeado por un cohete. El gobernador de Erbil ha señalado que los ataques no causaron víctimas, ni daños materiales, y que solo un almacén del complejo ha resultado dañado. Ninguna persona o grupo se ha atribuido todavía la responsabilidad del incidente.
Asimismo, ha informado a fuentes locales que se ha iniciado una investigación sobre el suceso. El Ministerio del Interior del gobierno regional del Kurdistán iraquí ha confirmado, a su vez, que se están llevando a cabo pesquisas. Esta ofensiva ocurre una semana después de los diálogos estratégicos entre EE.UU. e Irak, en los que se acordó la retirada de “todas” las tropas de combate estadounidenses del país árabe. A lo largo de los últimos meses se han estado elevando las voces que exigen la salida de las tropas norteamericanas, a las que consideran fuerzas invasoras. También han aumentado los ataques contra las bases, soldados y las instalaciones militares operadas por Washington en el territorio iraquí.
En este sentido, el pasado 16 de marzo, siete proyectiles impactaron contra la base aérea de Al-Balad, en la provincia central iraquí de Salah al-Din, ocupada por las tropas estadounidenses. Mientras tanto, el 3 de marzo, un subcontratista estadounidense murió en un atentado contra otra base aérea ocupada por soldados norteamericanos, Ain al-Asad, en la provincia de Al-Anbar, en el oeste de Irak.

Por otro lado, el lunes, un convoy de apoyo para las tropas de EE.UU. en Irak fue asaltado en el centro del país árabe, y el 5 de abril, tres convoyes militares estadounidenses fueron atacados en las provincias iraquíes de Babelb (al sur de Bagdad, la capital) y Al-Yusufiya (centro), así como en Al-Qadisiya (sur).