En la historia del deporte, las apuestas siempre estuvieron relacionadas a la popularidad que generaba la determinada disciplina en la población, que además de dedicar su tiempo de ocio para ver un evento deportivo, también expandía su experiencia al apostar con el resto de los asistentes.
Los deportes que iniciaron estas prácticas fueron las carreras de caballo y el boxeo. Deportes de mucha acción y adrenalina, y en particular el boxeo, captó mucho el interés de los apostadores al ser un deporte en el que podías apostar a una de dos alternativas. Quizás esto fue lo que generó el crecimiento de popularidad más importante que para la carrera de caballos, que era un deporte en el que participaban hasta 12 oponentes diferentes, lo que significaba una multitud de opciones y por consecuente, menos opciones de ganar.
Las primeras estrellas pugilísticas del boxeo fueron Jack Dempsey y Jack Johnson a inicios del siglo 20. La introducción de cinturones de campeón en esta época significó que para mantener sus títulos de campeones, los boxeadores tenían que enfrentarse a los mejores peleadores del mundo y esto hizo que el mundo de las apuestas creciera lado a lado del boxeo.
Después de que Jack Johnson se haya convertido en 1908 en el primer campeón de pesos pesados afroamericano, fue Jack Dempsey el que siguió su estela de campeón en 1920. Para este entonces, los encuentros de boxeo se realizaban en grandes arenas en donde se realizaban apuestas bestiales de dinero a cada boxeador. Se estima que la pelea entre Dempsey y Georges Carpentier de 1921 recaudó más de 1 millón 789 mil dólaressolo en venta de entradas. Las cifras de las apuestas nunca fueron determinadas a ciencia exacta, pero se estima que serían del orden de entre los 3 y 6 millones de dólares.
Con la llegada de Cassius Clay, más conocido como Muhammad Ali, el interés en el boxeo llegó a niveles nunca antes vistos, y con él, el desarrollo de las apuestas daría un salto.
Los adeptos a las apuestas empezarían a analizar de forma detallada a cada boxeador. Sus estilos de pelea, puntos fuertes y débiles. Las apuestas dejarían de ser solo un pasatiempo y pasarían a ser una ciencia, con datos que llegaban a cada vez más detalles, como la posición de los brazos de cada boxeador, o sus golpes favoritos y en que lugar del cuerpo apuntalaban más golpes.
Hoy en día, la revolución tecnológica del internet permite que las apuestas en el boxeo se abran a nuevos horizontes. Diferentes plataformas online de casino en vivoofrecen la posibilidad de realizar apuestas múltiples en los combates, esto significa que además de apostar al ganador, puedes apostar también a la decisión final, apostar en cada ronda y apostar al total de rondas que durará el encuentro.
En la actualidad, los números son bestiales, y los récords de cifras apostadas se van venciendo año tras año como si fueran piezas de domino cayendo una después de otra.
En el año 2015, la pelea de Floyd Mayweather contra Manny Pacquiao recaudó unos 60 millones de dólares en materia de apuestas. ¡Y solo en estado de Nevada!
Para la pelea del 2017 entre Mayweather y el luchador de UFC, Conor McGregor, las cifras de apuestas en el estado de Nevada llegaron a los 80 millones de dólares. Se registraron entre otras apuestas, dos en particular que eran de 1 millón de dólares cada una. Cifras tan elevadas que incluso hicieron temblar a las casas de apuestas, ya que daban por favorito a Mayweather, y de haber sido McGregor el ganador, hubieran incurrido en perdidas multi millonarias.