El grave problema del desempleo

  • En el trabajo y por lo tanto el empleo es lo que da sustento a la evolución de cualquier país, mientras haya más empleo, hemos consumo y mientras haya más consumo habrá más producción y desde luego más empleo integrando de esta manera el círculo virtuoso de la riqueza de los países.

Pero el 2020 pasará a la historia de México como el año más terrible para la economía mexicana: desaparecieron más de 400 mil empresas, y se esfumaron más de un millón de empleos formales, el PIB cayó 9.1% y el número de pobres creció en más de 10 millones y en efecto dominó sigue creciendo en número de pobres en México.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador necesita casi un milagro para recuperar el empleo que había en México antes del Covid. La confianza a la inversión es vital, pero antes debe cumplir varias condiciones.
Las delinean la OCDE de José Ángel Gurría, el Banco Mundial de David Malpass, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de Refiloe Litjobo, la Cepal de Alicia Bárcena y el sector privado.
Por ejemplo la OCDE, en las Perspectivas 2020 para América Latina, sugiere incrementar el apoyo económico directo a personas y empresas para mitigar efectos del Covid, dar facilidades para implementar tecnologías digitales y fomentar la cooperación entre empresas.
Por su parte El Banco Mundial considera que México debe emprender una reforma fiscal para enfrentar la informalidad en la economía, así como flexibilizar los esquemas laborales en condiciones similares a las que existen en Norteamérica y países europeos. También debe promover esquemas de contratación flexible de modo que se prevenga el aumento del empleo informal.
Y la organización internacional del trabajo (OIT) considera que la falta de certidumbre para la inversión, así como de programas de estímulos fiscales para las empresas, son factores determinantes para la pérdida de puestos de trabajo.
En cuanto la Cepal propone mantener e incrementar estímulos fiscales y monetarios en los sectores productivos, favorecer la generación de empleos formales e innovación tecnológica orientada a la reactivación de la economía, otorgar financiamiento a Pymes e incentivar la cooperación Internacional.
Pero el sector privado advierte que el gobierno de López Obrador debe hacer un esfuerzo extraordinario de concertación política con empresarios y sindicatos para generar confianza a la inversión nacional y extranjera.
Así, para que la economía mexicana genere los empleos necesarios, es indispensable que el gobierno decida de qué lado está.
En un año político electoral, donde se define el control de la Cámara de Diputados, la tentación de seguir polarizando el país es mucha. Pero el Ejecutivo y las fuerzas políticas deben convenir en resolver los desequilibrios estructurales o hacerlos más grandes.
El “milagro” del empleo que se genera mediante la confianza a la inversión, es la tabla de salvación para sacar a más de 20 millones de mexicanos de la pobreza y alcanzar niveles de crecimiento económicos superiores al 4%.
No hay otro camino. Y el paso del tiempo hace que las cosas sean más difíciles.
La pandemia de coronavirus al parecer continuará además del Covid-19 con otras cepas tal vez más agresivas como la B117, las prescripciones de movilidad se incrementarán y los protocolos sanitarios se harán más intensos y será más difícil crear empleos.
Es necesario poner atención a lo que opinan los expertos porque de alguna manera, es decir de una forma u otra debemos como mexicanos que salvar al país de esta gran catástrofe de desempleo.
Y se debe de hacer desde la cúpula de la administración pública porque el paso siguiente es el incremento de la delincuencia por hambre.