Es muy cierto: En política del plato a la boca se cae la sopa

Ricardo Gallardo Cardona ha armado un circo de varias pistas en donde incluye acróbatas, payasos, malabaristas y todo tipo de animales feroces y amaestrados.

Auténticamente esto es lo que ha hecho y que él se incluye como acróbata, payaso, malabarista y de pronto aparenta ser un feroz animal o un manso animal amaestrado.
Todo este circo lo ha estado armando y presentando en diferentes municipios y en la capital de la República con la intención de recibir apoyos para convertirse en candidato al gobierno del Estado en 2021 representando al partido verde.
Se ha rodeado de un numeroso grupo de payasos y acróbatas que actúan en el circo de la política bajo las órdenes de él, después de todo dicen que paga buenos sueldos, ha tratado por varios medios de disfrazarse de “Morenista” a partir de que este grupo político ganó la presidencia de la República y la mayoría en el Congreso de la unión.
Porque en 2018 Ricardo Gallardo y su padre atacaban furiosamente al llamado movimiento de regeneración nacional encabezado por Andrés Manuel López Obrador, llegándolo a correr de la plaza de fundadores para que no pudiera realizar desde allí su mitin de cierre de campaña.
Le asignaron el cruce de la avenida 20 de noviembre y avenida de la Paz como una forma de humillación política hacia este candidato que posteriormente resultó el triunfador del proceso electoral de 2018.
Arrepentidos buscaron perdón tanto del propio presidente triunfador como de los dirigentes del partido Morena. Pero en política los agravios son eternos y el rencor es profundo y para siempre; al hoy presidente de la República no se le olvida que tuvo que improvisar un pequeño tapanco a mitad de la avenida 20 de noviembre para cerrar su campaña en San Luis Potosí.
Los dirigentes de Morena en el Estado potosino esperaban tener la plaza de fundadores totalmente llena con un gran tapanco como escenario. Esta humillación política no se olvida en el grupo de Morena.
Buscando acercarse a Morena con algo propio en las manos traiciona al PRD y renuncia a él, mientras estaba comprando la franquicia del partido verde, conocido como un grupo político corrupto desde su origen.
Actualmente el diputado federal Ricardo Gallardo Cardona se ha convertido en el bufón de ocasión para agradar al Presidente de la República y simultáneamente buscar protección ante todos los problemas judiciales que tiene por resolver.
De una manera auténticamente “rastrera” felicita y halaga cuanto dice y hace Andrés Manuel López Obrador. Se sabe que ha logrado agradar económicamente a Mario Delgado hoy presidente del partido morena.
Ricardo Gallardo Cardona lo llena no sólo de halagos sino de regalos en especie y en efectivo, aseguran que le obsequió a Mario Delgado una elegante residencia en el Estado de Texas y además se sabe que frecuentemente lo “saluda” con portafolios repletos de dinero.
Asimismo se asegura que Ricardo Gallardo Cardona fue el principal colaborador económico en la campaña que hizo Mario Delgado para llegar a la presidencia de Morena.
Por este compromiso Mario Delgado vino hasta San Luis Potosí a presentar personalmente como presidente nacional de Morena ante el CEEPAC una propuesta de convenio de coalición entre el partido verde propiedad de Ricardo Gallardo y Morena, con la intención de proponerse Ricardo Gallardo como candidato de esta coalición al gobierno del Estado.
Pero, ante la recepción en el Ceepac de dos registros de alianza para la gubernatura del estado por parte de dos corrientes del partido Morena, será el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana quien dictamine cuál de ambos documentos cumple en forma y fondo con la Ley Electoral.
Ante estas circunstancias la normativa marca que el Ceepac tiene un plazo de diez días hábiles para analizar la documentación y determinar cuál de los dos grupos llena los requisitos para formar esta alianza con el partido morena.
Los dos convenios de coalición ante el Ceepac son: uno que incluye al Partido Verde y Nueva Alianza y otro que solo es entre Morena y PT.
Y en esta decisión del Ceepac es en donde a Ricardo Gallardo se le puede caer su proyecto por eso digo que en política es cierto que “del plato a la boca se cae la sopa”.