El objetivo de la reforma a la Ley de Banco de México (Banxico) tiene como objetivo beneficiar la economía de las familias mexicanas mediante la generación de un entorno más eficiente para la administración y recepción de dólares en efectivo en beneficio de quienes reciben remesas, además de apoyar a comercios y zonas turísticas, así lo detalló el senador Alejandro Armenta.
A través de una conferencia de prensa, el también presidente de la Comisión de Hacienda del Senado indicó que, con esta iniciativa se propone generar un esquema financiero de intercambio, administración y circulación de divisas más adecuado y eficiente, que sea beneficioso para las familias mexicanas.
«Hay que decir que México es un país abierto al turismo, a la inversión extranjera, al comercio internacional y al flujo migratorio. En el 2019 más de 720 mil millones de pesos fueron los ingresos producto de las remesas de millones de mexicanos que sostienen la economía mexicana y que contribuyen a la economía norteamericana», comentó.
El senador indicó que desde 2012 el gobierno de Estados Unidos impuso una serie de restricciones a las operaciones con dólares desde y hacia su territorio, situación que restringe la compra y venta de estas divisas desde las instituciones de crédito, afectando a las familias que dependen de los recursos provenientes de las remesas, así como a las Pymes, principalmente a las que se ubican en zonas turísticas.
Dentro de la iniciativa se pretende establecer las bases elementales que deberán observar las instituciones de crédito para lograr la efectiva prevención contra las operaciones con recursos de procedencia ilícita y de financiamiento al terrorismo.
La iniciativa también establece que únicamente el excedente del efectivo que capten las instituciones de crédito, que no pueda ser repatriado a su país de origen, es susceptible de formar parte de la reserva internacional, lo que de acuerdo con la postura del Senado, fortalece la seguridad y la legalidad de las transacciones en efectivo.
Finalmente, el senador Alejandro Armenta indicó que respetan e impulsan la autonomía del Banco de México, sin embargo, considera que, tanto el organismo central como la Secretaría de Hacienda y Crédito Público deben construir y suscribir a través de la Secretaria de Relaciones Exteriores instrumentos financieros internacionales con la Reserva Federal de Estados Unidos y las autoridades financieras mexicanas para atender el problema de millones de familias que viven del turismo o de las remesas enviadas por los connacionales que radican en el extranjero.
¡Súper remesas!
Tienen mejor registro en tres años con todo y pandemia
Entre enero y octubre de este año, el envío de dinero a México por parte de los connacionales registró un aumento de 10.4 por ciento, al totalizar 33 mil 564 millones de dólares, frente a los 30 mil 395 millones de igual lapso de un año antes.
Esto significó el mejor registro para las remeses de 2017, año en el que tuvieron un alza de 12.7 por ciento.
De acuerdo con datos del Banco de México, solo en octubre las remesas crecieron 14 por ciento a tasa anual, pese a la crisis del COVID-19 que se vive en todo el mundo.
Alberto Ramos, economista en jefe para Latinoamérica de Goldman Sachs, comentó que la cifra es reflejo de los apoyos fiscales en Estados Unidos, además de un tipo de cambio más competitivo.
“Las generosas transferencias fiscales de apoyo a salarios en Estados Unidos, un tipo de cambio muy competitivo y una profunda contracción de la actividad y el empleo en México pueden haber actuado como impulsores de las remesas”, indicó.
El directivo añadió que los sólidos flujos de remesas al país han venido agregando apoyo a la cuenta corriente y al consumo privado, en particular para las familias de bajos ingresos, que tienen una alta propensión al consumo y son los destinatarios de tales transferencias.