Vincent Van Gogh, un niño en busca de aventuras

Desde niño, Vincent van Gogh (1853-1890) observaba las estrellas soñando en poder pintarlas. Le gustaba el amarillo de los girasoles y tenía curiosidad por los nidos de los pájaros, metáfora del hogar que buscó a lo largo de toda su vida. Tales aristas fueron plasmadas por Mario Iván Martínez, en su faceta como escritor en el libro De nidos, estrellas y girasoles, publicado por Penguin Random House.

En la publicación de 12 capítulos, dirigida sobre todo al público infantil, Mario Iván describe la infancia y adolescencia del pintor, sus momentos de creatividad, su formación, su rebeldía y su fraternidad con su hermano Theo. Es así que expone la inclinación por la pintura de un pequeño pelirrojo con las mejillas llenas de pecas: el niño Vincent van Gogh.

Quise que el libro se llamara De nidos, estrellas y girasoles porque una de las cosas que Vincent disfrutaba de niño era aventurarse con Theo al bosque a recolectar bichos y nidos. Le fascinaban desde chico y así comenzó a identificar las distintas clases de pájaros que viven alrededor de Zundert, donde ellos vivían en Holanda. Por otro lado, Vincent estuvo toda su vida buscando un nido, una identidad, una pareja, una familia, un hogar y reconocimiento. Por ende, creo que aquí el doble juego con la palabra ‘nidos’ es propicio. ‘Estrellas y girasoles’ son claros porque fueron sus temáticas favoritas y recurrentes en su pintura.

Lo que hice fue un retrato de esta pequeña ciudad de Holanda, alrededor de 1863, donde este niño travieso, pecoso, al cual le encantaba meterse en problemas, establece esta relación tan fraterna con su hermano y cómo era la vida ahí. Su mamá era pintora aficionada y él descubre la posibilidad de crear distintos colores alrededor de los colores primarios. Sus primeras aventuras en el pincel fueron al lado de su mamá. Cuando llegamos a una temática interesante, hay pequeñas referencias mini enciclopédicas para los niños, para complementar su disfrute del libro”, expresó Mario Iván Martínez a un Diario de circulación nacional.

En el libro se crean algunas aventuras ficticias “que pudieran haber sido plausibles”. Una de ellas es cuando Vincent y Theo suben a ver las estrellas, cuando su padre está dormido y ahí Vincent sueña con la posibilidad de algún día pintarlas.

Quise construir la infancia de Van Gogh para resaltar aspectos luminosos de su formación. Obviamente también de su rebeldía incipiente desde sus primeros años, pero sobre todo la fraternidad, con la que pueden identificarse los niños, entre dos hermanos, Vincent y Theo, que se gesta en su infancia.

Vincent le llevaba cuatro años a Theo y en sus inicios él se convierte como en una especie de mentor, de padre sustituto, ya que su padre, el pastor protestante Theodorus, era alguien muy distante, un típico padre estricto del siglo XIX. Así que se establece una relación de gran complicidad y de juego entre los hermanos”, destacó.

PROYECTO INTEGRAL

El proyecto de investigación acerca de Vincent van Gogh que realizó Martínez nació tras la invitación del Centro Cultural Tijuana (Cecut), por la celebración de su 35 aniversario, para dar voz al documental Van Gogh: Pinceladas de un genio, a proyectarse en formato IMAX en 2017.

El libro es una ramificación de un proyecto que se ha convertido en algo muy integral para mí, porque ha tenido múltiples aristas. El Cecut requería de una voz en español para doblar ese documental. Acepté más que encantado. De ahí surgió la idea, al conocer más sobre Van Gogh, de hacer un prólogo escénico (Van Gogh, mediodía en el alma) para la presentación del documental, para el que me caractericé del personaje.

Me di cuenta que éste sería un tema muy fértil para dar inicio a mi etapa como escritor. Comencé a documentarme muchísimo, ya que escribir sobre una figura alrededor de la cual se ha escrito una ingente cantidad de material, había que hacerlo muy personal: la aventura de un actor mexicano y su relación con Van Gogh. Así nació Vincent, girasoles contra el mundodramaturgia para tres actores”, relató.

El actor visitó Europa para recorrer los lugares que atravesó Van Gogh, donde pintó, murió y se hallan sus obras: Los museos Van Gogh, en Ámsterdam, y el Orsay, en París; las poblaciones Auvers-sur-Oise, Saint-Rémy-de-Provence y el hospital siquiátrico donde estuvo hospitalizado voluntariamente durante un año, Saint-Paul-de-Mausole, así como Arles, donde conoció la casa amarilla, entre otros puntos.

Fue un mes completo dedicado a Van Gogh. Regresé a México y se hizo el montaje en el Teatro Helénico (en 2019), después en el Teatro Libanés, cuya temporada se interrumpió por la pandemia que nos ocupa y abruma, pero que nos incita a reinventarnos”, dijo.

Martínez se acercó a la editorial Penguin Random House con el afán de que pudieran publicar su dramaturgia. Para entonces, ya lo habían invitado a que grabara los audiolibros El principito y La niña que adelantó el gran reloj.

Fueron francos al decirme que no hay tanto público para dramaturgia, pero qué tal si estuviera acompañada de una biografía sobre Van Gogh, muy personal, en donde amén de todas las anécdotas de rigor, incluyera mis experiencias en el viaje a Europa, desde la óptica muy personal de un actor mexicano. Luego me propusieron hacer algo para niños. La biografía para la dramaturgia y el libro para niños los pude cristalizar ahora en el encierro”, concluyó.