- Supuestamente habría abusado de dos niñas hondureñas que estaban bajo su resguardo en SLP
Luego de haber sido sentenciado a pasar nueve años tras las rejas, Alberto Rojo Zavaleta, ex delegado del Instituto Nacional de Migración, por hechos ocurridos el 4 de noviembre de 2013, agentes policiales ya se encuentran tras su pista, por el delito de abuso sexual en perjuicio de dos adolescentes hondureñas.
En efecto, trascendió y se presentaron pruebas documentales que la justicia federal se encuentra tras la pista de Alberto Rojo Zavaleta, quien en 2013, se desempeñaba como delegado del Instituto Nacional de Migración y fue presentada una denuncia en su contra por la embajada de Honduras, por el presunto abuso sexual en agravio de dos menores de edad; 16 y 13 años, de esa nacionalidad.
Alberto Rojo Zavaleta, delegado del Instituto Nacional de Migración en 2013, fue hallado culpable del delito de abuso sexual cometido en contra de dos menores hondureñas de 16 y 13 años de edad mientras se encontraban en resguardo de la institución el 4 de noviembre de 2013 por lo que el Juez Segundo de Distrito lo sentenció a nueve años de prisión, el pago de la reparación del daño y la cancelación de cualquier beneficio sustituto de la pena impuesta.
Los antecedentes del caso registran que Alberto Rojo Zavaleta, fue destituido como delegado en San Luis Potosí del Instituto Nacional de Migración y quedó sujeto a una investigación por parte de la Procuraduría General de la República por una denuncia del Consulado de Honduras por el presunto abuso y hostigamiento sexual cometido en contra de dos migrantes menores de edad, que permanecieron retenidas durante un mes en las instalaciones de la delegación.
Fueron las afectadas, de 13 y 16 años de edad, quienes denunciaron la agresión de Rojo Zavaleta y uno de sus colaboradores. Las afectadas fueron trasladadas de la capital potosina, por razón de seguridad, luego declarar en la Mesa 6, de la Agencia del Ministerio Público Federal de la Procuraduría General de la República.
En ese entonces, el Cónsul General de Honduras en San Luis Potosí, Ósmar Adán Cárcamo Iglesias, expuso que este era el primer caso que se tiene registrado de abuso sexual en contra de ciudadanos hondureños por parte de funcionarios del INM.
Así las cosas, gobierno de Honduras presentó formalmente una denuncia ante la Procuraduría General de la República por acoso y hostigamiento sexual en contra de las dos menores migrantes, quienes fueron aseguradas junto con otras personas originarias de ese país y permanecían en las oficinas de la Delegación del Instituto Nacional Migración, donde fueron objeto de acoso y hasta de tocamientos por parte del titular Alberto Rojo Zavaleta, quien frecuentemente llegaba en estado de ebriedad, lo que provocó que solicitaran el auxilio de la representación diplomática de su país en la entidad.
Además, el, en ese entonces, director de Gestión, Canalización y Quejas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Pablo Loredo Oyervide, explicó que se recibió una queja de presuntas violaciones a los derechos humanos, en contra de las menores, que refirieron que fueron víctimas de acoso sexual y tocamientos por parte del ahora ex Delegado del INM.
Esa denuncia se turnó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), debido a que se trataba de funcionarios federales, que dio entrada a la queja 1099/2013.
Luego, en las oficinas centrales del INM confirmaron el cese de Rojo Zavaleta a través de un comunicado. El funcionario llegó a la delegación en junio de ese año. También se le acusó de abuso de autoridad y otros posibles delitos.
Ahora es buscado por agentes policiales, luego de haber sido librada la orden de aprehensión, justo siete años después de haber sido denunciado.