La mítica historia acerca de las sirenas puede que no suene tan descabellado como se cree. O al menos algunos así lo creen. Durante gran parte del desarrollo de la historia marítima se han tejido leyendas acerca de la existencia de seres humanos con características de animales marinos. Las sirenas han sido objeto de intriga tanto para investigadores marinos como para interesados en el tema y, en ocasiones, pueden llegar a coincidir entre sí cuando se discute sobre la veracidad de su leyenda.
El portal Ecoosfera ha compartido el trabajo que, en 1990, el oceanógrafo y profesor Karl Banse publicó para la Asociación Norteamericana de Limnología y Oceanografía sobre la biología, cultura y extinción de las sirenas, “Mermaids, their biology, culture and demise”. Dicha investigación podría considerarse como una de las únicas indagaciones científicas acerca de la existencia de sirenas. Vale señalar que en ese tiempo, el mencionado trabajo científico, había sido tomado con poca seriedad dentro de la comunidad científica.
En su investigación, Karl Banse establece que éste se sitúa en algún lugar entre la ciencia, la antropología y la historia, pues en el texto se hace mucho uso de la inferencia y la deducción, otorgándole a su artículo una credibilidad algo inusual. El planteamiento principal es que las sirenas son seres extintos y que su desaparición se debe, probablemente, a los avances tecnológicos de la navegación y a los cambios en las poblaciones de medusas.
Algunas características que describen en el artículo son, por ejemplo, que las sirenas no tenían escamas sino pliegues rugosos como los de los armadillos y que habitaban en aguas cálidas, según la región de la que provenían. El investigador ha establecido tres especies de sirenas: Sirena sirena (Mar Mediterráneo), Sirena indica (Mar Caribe) y Sirena erythraea (Mares Rojo, Arábigo e Indonesio).
El documental de la discordia
Pero el trabajo de Karl Banse no ha sido el único apunte científico sobre el tema. Un documental sobre el tema en cuestión, que había generado toda clase de respuestas, es “Mermaids: the body found” emitido primero por Animal Planet y luego por Discovery Channel, en el año 2012.
En él se narra el trabajo que siguió un grupo de biólogos de la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA) o Administración Nacional Oceánica y Atmosférica en español. Ellos se encontraba investigando sobre un varamiento masivo de ballenas en Washington, Estados Unidos. Luego, el documental narra las acciones posteriores que el equipo tomaba tras descubrir ciertos indicios anómalos de lo sucedido en ese y en Sudáfrica. El equipo terminó encontrando indicios de la existencia de unos extraños seres acuáticos; unas evidencias que eran difíciles de concebir para ellos.
El conjunto de biólogos liderado por el Dr. Brian McCormick había hallado rastros de una especie subacuática no identificada que, aparentemente, podría estar relacionada con la existencia de sirenas. Finalmente, luego de la exposición de pruebas que intentarían reflejar el aparente hallazgo de los restos de una criatura mitad humana mitad pez, los investigadores concluyeron con la idea firme de haber descubierto una sirena. Las pruebas, según cuenta el documental, no eran del agrado de la Marina de los Estados Unidos, razón por la que terminaron por confiscar todas las evidencias halladas hasta ese momento.
Tras la emisión del documental, las respuestas no tardaron en aparecer. Según el portal Publimetro, el aparente carácter serio del documental fue desmentido por la misma Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos donde describe lo siguiente: “No hay ninguna evidencia de que estas criaturas antropoideas hayan sido descubiertas”, dice el artículo publicado por científicos estadounidenses, el cual agrega que “sin embargo, no se sabe por qué la mayoría de los marineros cree en ellas. La respuesta solo la pueden dar solo los historiadores, los filósofos y los antropólogos”.
El documental fue mostrado en el marco de ‘La Semana de Monstruos’ organizada por la cadena Animal Planet. Según se puede ver en Actualidad RT, el autor del material, Sid Bennett, afirma que la ciencia sirvió de trampolín a la imaginación en la popularización de las sirenas. También hace hincapié en que contiene varios hechos reales, como registros de pruebas acústicas de la Marina de los Estados Unidos de los años 90.
Diferentes puntos de vista
En el momento de la difusión del documental, el portal Libertad Digital recogió las percepciones de distintos especialistas de una entrevista en esRadio. Por ejemplo, Bibiana González, la jefa de programación de Discovery Max (canal que transmitió el documental) explicó que dicho material “tiene que ver con un programa científico que parte de una investigación desde hace dieciséis años”. Además, mencionó que las pruebas “profundizan en la posibilidad de la existencia de estos seres y lo complementan con imágenes, reconstrucciones y con un hilo argumental bastante científico”.
Por otra parte, el secretario de la Sociedad Española de Biología Evolutiva Toni Gabaldón desestimó la aparente seriedad del material difundido por Discovery, argumentando que “no existe ninguna evidencia aceptada que corrobore la existencia de estos seres”. Gabaldón cuenta que “la propia ficha técnica del documental afirma que es ciencia ficción por lo que es muy especulativo que una parte de los simios se fueran bajo el agua”.
Sobre este planteamiento, el especialista cuenta que en los años sesenta hubo algunas hipótesis en torno al mono acuático con la que intentaban explicar algunas diferencias que existen en el ser humano respecto a otros primates. Toni Gabaldón afirma que algunos científicos habían propuesto la existencia de algún ancestro adaptado al agua que podría explicar esas diferencias. Esa hipótesis ya se ha descartado y ha dejado de ser tomada en serio por la comunidad científica.
Aunque el asunto luce zanjado parece que al final comprobar la existencia de las sirenas no podrá pasar por el fino ojo de la credibilidad, algo que resulta muy difícil de comprobar hoy en día si se carecen de las herramientas necesarias para su verificación. Por el momento la leyenda sobre estos seres seguirá alimentando la curiosidad colectiva día a día y nutriendo de las historias que se cuenten sobre ellas.
Aunque en principio se duda de la existencia de las sirenas, criaturas marinas mitológicas pertenecientes a las leyendas y al folclore, actualmente, hay quienes creen, a través de documentales y artículos que realmente existen.
Un controvertido largometraje, titulado `Sirenas: el cuerpo hallado´, daba a entender que quizás existían, aunque, y según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EEUU (NOAA) lanzó un comunicado que no se habían encontrado nunca evidencias de la existencia de estos humanoides acuáticos, en respuesta al largometraje antes mencionado.
Paul Robertson, investigador y biólogo de la NOAA, lanzó un nuevo documental, bajo el nombre de “Sirenas: la nueva evidencia”, donde mostraba pruebas de sirenas reales. Pudo grabar un sonido algo extraño y desconocido del fondo de mar que al principio se creía que eran ballenas, pero luego se vieron cuerpos de una nueva especie, ¿Se trataba de sirenas?
En la Antigüedad clásica, a las sirenas se las representaba como seres híbridos con rostro o torso de mujer y cuerpo de ave que vivían en zonas rocosas y posteriormente aparecieron con cola de pez y a éstas se les atribuía una voz melodiosa con la que atraían a los marineros.
La primera vez que se oye hablar de ellas sobre papel fue en una mención en la Odisea de Homero, pero lo cierto es que antes ya habían representaciones artísticas de antigüedad mucho mayor, y se las unía al otro mundo, porque representaban a los espíritus de los difuntos y/o que se las considerara encargadas de transportar las almas al Hades.
Mucho antes de Homero, ya habían dibujos en pinturas rupestres del Paleolítico tardío (Edad de Piedra) de sirenas. Parece probado que no existen, si bien las investigaciones en la actualidad continúan para aportar pruebas para dar establecer que las sirenas existen aunque es un hecho que solo las vemos en los cuentos.
Por ejemplo, algunos investigadores descubrieron nuevas especies en el mar y analizaron sus partes corporales. Encontraron huesos extraños de pelvis, estructuras de manos-aletas, caderas de un animal erguido… según parece, estos investigadores fueron confiscados por las autoridades y quienes creen en la existencia de las sirenas explican que las autoridades frenaron todo tipo de nuevas investigaciones.