Cada día se incrementa esta plaga en todo el Estado potosino
San Luis Potosí se ha llenado de una nociva plaga de “chapulines políticos” y “grillos” que sirven de marco a la plaga de chapulines y cada día se incrementa esta plaga en todo el Estado potosino.
Se trata de políticos ya conocidos o como dicen muchos se trata de “cartuchos quemados” que quieren seguir tronando pero que sus mentiras y sus falsas promesas agotaron la “pólvora” que un día pudieron tener.
Estos llamados chapulines de la política, en su mayoría ya muy conocidos tratan de brincar de un cargo público a otro ya sea de elección popular o por asignación de algún poder del Estado. Estos chapulines dejan el cargo que les fue asignado sin importarles nada si lo hicieron bien o mal, comúnmente lo hacen mal, en especial los chapulines del poder legislativo que ya andan ilegalmente en campaña volviendo prometer lo que no han cumplido en dos o tres ocasiones.
Algunos ya fueron presidentes municipales y no cumplieron y dejaron obras tiradas culpando al gobierno del Estado y ahora están como legisladores y de ahí pretenden brincar al gobierno del Estado y en el mejor de los casos brincar al en el mismo lugar para quedar en el mismo cargo.
Estos chapulines están rodeados de una enorme plaga de grillos que meten ruido (hacen chismes políticos y personales) por dondequiera que pueden, los grillos políticos son personas que no conocen absolutamente nada de cuestiones políticas aun sin embargo emiten opiniones por doquier asegurando conocer el tema. En este momento el ruido que están metiendo los grillos políticos ya es intolerable: aseguran conocer encuestas, aseguran haber escuchado propuestas, dicen estar enterados de nombramientos y designaciones en los partidos políticos, pero todo es falso, sólo es ruido de grillos políticos.
En San Luis Potosí estamos padeciendo mucho de una plaga de chapulines políticos; tal vez el caso más penosamente sobresaliente es el de Ricardo Gallardo Cardona, que brincó de la presidencia municipal de Soledad de Graciano Sánchez al Congreso Federal y que ahora absurdamente quiere brincar al gobierno del Estado de San Luis Potosí, desde luego sin haber acabado su compromiso en el Congreso de la unión.
Ricardo Gallardo Cardona ha creado una plaga de grillos a sueldo para que vayan por ahí dispersando información confusa.
Bíblicamente una de las plagas que acabó con la prosperidad de Egipto fue una plaga de chapulines o langostas, afortunadamente a estas alturas de la civilización política ya sabemos cómo fumigar a las plagas de chapulines y es de la manera más sencilla: divulgando la verdad y exponiendo el pasado corrupto de los chapulines que igual que las langostas destruyen toda las cosechas por donde pasan.
Ya estamos listos con el fumigante que acabará con estos chapulines políticos que hoy amenazan con destruir al Estado de San Luis Potosí.