Lo que tus fantasías sexuales podrían decir sobre ti, según un experto en sexo

  • Alguna vez has imaginado tener un trío, conocer a un extraño sexy que te espose a la cama o que tu pareja te hable sucio durante el sexo? No estás solo.

Justin Lehmiller, un investigador sexual del Instituto Kinsey, encuestó a 4,175 estadounidenses sobre sus fantasías sexuales favoritas para su libro «Dime lo que quieres». En entrevista para Insider explica lo que podrían significar sus hallazgos.
Según Lehmiller, es imposible hacer declaraciones generales sobre las motivaciones subyacentes de una fantasía en particular. Esto porque dos personas podrían tener la misma fantasía por razones completamente diferentes.
«Nuestras fantasías son muy complejas y el grado de énfasis y enfoque en el sexo difiere de una persona a otra; lo que encontramos eróticamente atractivo, o lo que nos excita, es increíblemente diferente de una persona a otra», dijo Lehmiller a Insider.
Pero su investigación también mostró temas comunes en las razones por las que las personas fantasean; además de que las necesidades emocionales a menudo están relacionadas con lo que una persona encuentra sexy.
Si fantaseas con el romance y la pasión, podrías tener miedo al abandono
Las necesidades emocionales pueden manifestarse en una fantasía que es extremadamente romántica o apasionada.
Lehmiller dijo que las personas que temen el abandono y pueden sufrir ansiedad por el apego, «son más propensas a tener imágenes románticas y apasionadas en sus fantasías; están tratando de calmar esa sensación de inseguridad que tienen».
Al soñar despierto con otra persona que los consume con pasión y amor, pueden relajarse y concentrarse en el placer sexual, según Lehmiller.
Si imaginas tener un trío con tu pareja, es posible que necesites atención
Durante su investigación, Lehmiller descubrió que los tríos eran una de las fantasías más comunes que tenían los encuestados. Cuando las personas sueñan con un trío con su pareja y otra persona, podría ser porque quieren toda la atención en ellos, según Lehmiller.

Si alguien fantasea con un trío en el que está «entrando en la relación de otra pareja», la persona con la fantasía puede anhelar la aventura en lugar de la atención.

Si fantaseas con ser dominado en el dormitorio, podría ser porque quieres perder el control
La sumisión, o que tu pareja sexual te domine, es otra fantasía popular tanto para hombres como para mujeres, dijo Lehmiller.

Estas prácticas se agrupa en el acrónimo BDSM, que es la abreviatura de bondage, dominación, sumisión y sadismo-masoquismo. Estas fantasías tratan del intercambio de poder entre dos personas.

Cuando alguien fantasea con que su pareja sexual los domina, a menudo es porque esa fantasía les permite sentirse adorados y sentir que su pareja «demuestra una atracción irresistible y abrumadora», según Lehmiller.

Las personas que sienten ansiedad en cuanto al sexo también pueden gravitar hacia las fantasías de sumisión, porque ese rol les quita la presión de desempeñarse proactivamente.

«Y creo que para mucha gente la sumisión es una experiencia muy liberadora que les permite salir de su cabeza y entrar en el momento», dijo Lehmiller.

Si tus fantasías sexuales se sienten tabú, podría significar que estás abierto a probar cosas nuevas
Es un error pensar que cualquiera que tenga fantasías sexuales las tenga por motivos psicológicos profundamente arraigados, dijo Lehmiller.

En su investigación, encontró que las personas que tienen fantasías a menudo, o fantasías que son más tabú que los tríos y el BDSM, tienden a ser más imaginativas y abiertas a cosas nuevas que aquellas que fantasean menos.

Dijo que las personas que tenían personalidades más abiertas a nuevas experiencias tendían a «fantasear más con casi todo, incluidos escenarios realmente inusuales y extraños».

«Y no significa nada más profundo, aparte de que les gusta pensar mucho. Así que siempre tenemos que ser un poco cuidadosos al decir que nuestras fantasías siempre tienen un encuentro más profundo porque a veces no es así», dijo Lehmiller.

Las personas mayores tienden a tener más fantasías sexuales
Por último, Lehmiller descubrió que las personas de entre 40 y 50 años que mantienen relaciones monógamas a largo plazo tienden a fantasear más que las personas más jóvenes.

Dijo que esta tendencia probablemente existe porque estas personas quieren salir de las rutinas sexuales y probar algo nuevo.

«Creo que cuando se justifica esa necesidad de novedad, que suele ocurrir en relaciones monógamas de largo plazo, la gente usa sus fantasías como una forma de liberarse y satisfacer esa necesidad de novedad».