Ricky Bandejas estaba en su casa en Florida, disfrutando de tiempo con su familia, cuando recibió la llamada de su promotora, Bellator. El estadounidense, de 28 años, había peleado en el último show que la empresa había organizado (22 de febrero en Dublín) y no tenía prisa por meterse de nuevo a a la jaula. Creía que no le tocaría, pero se equivocaba. Le ofrecían un paso al frente: ser el estelar ante el exUFC Sergio Pettis. Reto complicado y con muchos focos, ya qué cerrará el primer show tras el COVID de Bellator. No lo dudó y aceptó.
Sin duda Bandejas es un prospecto muy valorado en Bellator y quieren potenciarlo. Si gana este viernes en el Mohegan Sun Arena de Uncasville (Connecticut), su cotización subirá mucho. Llega como underdog, pero su dinámica es buena. Desde que se cambió de equipo y entrena en el Americam Top Team ha crecido. Dos peleas y dos victorias por KO. Trabajo bien hecho y oportunidad para crecer. Él está a la espera de saber lo que sucede con el título del peso gallo. El japonés Kyoji Horiguchi renunció a él por lesión y la idea es que Juan Archuleta y Patrick Mix (los dos últimos que le han ganado) lo disputen. Esa pelea se cayó para esta cartelera. Si se recupera y Bandejas gana, puede opositar a esa plaza.