Basureros, fuente de ingresos y de alimentos de familias precaristas, afirman

Estaban rancios los cacahuatitos, pero eso fue lo que comimos hoy el día de hoy, también alcanzamos a comprar un kilo de tortillas porque vendí una bolsa de botellas de plástico, me dieron 15 pesos”, comenta Sonia Velásquez Bravo, habitante de la colonia Héroes Antorchistas de Chimalhuacán, asentamiento ubicado al sur de la ciudad.
Sonia Velázquez, tiene varias semanas sin empleo, fue despedida de la fábrica de pastas Barilla; no le dieron indemnización dado que donde laboraba es una empresa outsorcing, ahora para sostenerse se dedica a la recolección de papel, aluminio y plástico, para venderlo y obtener ingresos para sus manutención, aunque también en ocasiones, encuentra alimentos en los basureros para llevar algo de comer a sus dos pequeños hijos, uno de ocho años y una niña de tres, que tiene problemas de asma, “la doctora que atiende mi niña me pidió una careta para su protección y no tenía dinero para comprarla, pero me encontré una en un basurero, la lavé y se la puse a mi niña, es que la situación es muy dura”.