Guadalupe González, subcampeona olímpica y mundial de marcha, dijo que considera el retiro en caso de que no se le retire la sanción de cuatro años que tiene por el resultado analítico adverso en trembolona, esteroide usado en el ganado para aumentar el crecimiento muscular y el apetito, en una muestra tomada el 17 de octubre de 2018.
«Si se queda el castigo como tal son tres años, definitivamente no tendría mucho sentido si no tengo una competencia. No lo he pensado bien, pero posiblemente sí pueda decir adiós en ese momento. Posiblemente, no sé, igual y cambia mañana mi pensamiento. Siento que no tendría mucho caso. En dado caso que se me retire, espero poder con el tiempo que quede al clasificatorio estar bien y que el cuerpo me responda», señaló la atleta.
A pesar de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) dará el veredicto de su apelación por dopaje hasta el 31 de marzo, la medallista de plata en Río de Janeiro 2016, aún mantiene el sueño de competir en Tokio 2020.»Cada vez se vuelve menos probable, porque es real, pero confío que el 31 de marzo, que es la fecha que pusieron como límite para una solución ante mi proceso en el TAS, la resolución sea favorable. Supongo que hay ciertas dudas, supongo que la investigación tiene que ser más a fondo, ellos requieren tiempo y yo estoy en espera de que sea favorable para mí, que ellos no tengan dudas que soy inocente. Si ya esperé un año y meses, si ellos están pidiendo un tiempo más, ojalá que sea favorable», mencionó González. «Nada asegura que me lo van a quitar (el castigo), yo espero que sí.
Por eso acudí al TAS para que haya justicia ante alguien que no ha hecho trampa. Espero que salga bien aunque es una realidad que mi camino se vuelve más angosto, más corto y eso quita posibilidades, pero pues yo sigo entrenando», agregó la andarina. La máxima referente de la marcha femenil apeló la sanción ante el TAS respaldada por el abogado colombiano Andrés Charria.