El secreto de la Mamba Negra: ¿por qué este era el apodo de Kobe Bryant?

Todo apodo tiene su origen y la Mamba Negra no podía ser menos. Kobe Bryant, la leyenda de la NBA que falleció este domingo tras un accidente de helicóptero, era conocido por muchas cosas: la camiseta amarilla y morada de Los Angeles Lakers, los dorsales 8 y 24, y, además, por una peligrosa serpiente.
No obstante, a diferencia de lo que puedan pensar muchos, no se le identificaba con este animal por sus movimientos dentro de la cancha. El estadounidense decidió autodenominarse de esta manera por los problemas personales y diferentes asuntos con los que lidió en su carrera deportiva.
Kobe se puso este sobrenombre porque «tenía que organizar las cosas» así que creó la Mamba Negra. «Kobe tenía que tratar con los problemas personales, cuidar otros asuntos que estaban pasando… pero era la Mamba Negra la que salía a la pista y cumplía con el trabajo. Y ese trabajo era destruir a todo el mundo al que me encontraba enfrente en la pista», confesó.
La denuncia por ataque sexual en el verano de 2003 por parte de una trabajadora de 19 años del hotel The Dodge And Spa At Cordillera (Colorodo) fue uno de los factores determinantes. Este caso quedó en el aire y finalizó con una disculpa pública del jugador tras un acuerdo fuera de los tribunales.
Kobe Bryant lo cuenta en el documental ‘Muse’: «Pasé de ser una persona que estaba en la cima y al que todo le salía bien a, en solo un año, no saber dónde me llevaba la vida o siquiera si iba a seguir teniendo una vida como la que había conocido».

Kill Bill, clave en su apodo

Además, habló de manera indirecta de este episodio en él: «Escuchaba todo lo que decía la gente, así que necesitaba algún lugar para refugiarme del bombardeo. Necesita espacio para ocuparme de mis asuntos y que algo hiciera el trabajo: la Mamba Negra. Era como una avalancha, nada me iba a detener, nada se iba a poner en mi camino».
La película Kill Bill de Quentin Tarantino también tuvo mucho que ver. Una de las asesinas que aparece en ella posee extremas agresividad y agilidad y tiene este nombre en clave: «A partir de ahí empecé a leer cosas de este animal y fue como ‘wow, es una pasada’».

JERRY WEST: ‘PERDER A KOBE BRYANT FUE COMO SI PERDIERA A MI HIJO’

Todavía sin poder creerlo y con el alma destrozada, Jerry West encontró fuerzas para hablar sobre la partida de Kobe Bryant, aquien él consideraba como un hijo.
«No sabí si creerlo o no (…) Me decía ‘¡Oh no, esto no pude ser cierto, no puede!’ Y de pronto, entré en shock cuando me enteré. No tengo palabras. Aún tengo que asimiliar que (Kobe) se fue», dijo West en entrevista con The Athletic.
«Es como perder a mi hijo (…) Pienso en su familia, en su hija que también murió, y verlo con su familia. Pienso en el esfuerzo que puso en su academia de baloncesto, es algo que muchos atletas nunca consideran.
«Y ver cómo cambió después su carrera (incluyendo el Oscar que ganó por mejor corto animado). Él iba a tener una carrera legendaria fuera del baloncesto, y nos fue arrebatado tan rápido… es simplemente indescriptible para mí», prosiguió West con la voz entrecortada.
Cabe recordar que Jerry West era el gerente general de los Lakers en 1996, cuando el equipo de Los Angeles logró quedarse con Kobe tras hacer un canje con los Hornets durante el Draft.

¿POR QUÉ KOBE BRYANT VIAJABA EN HELICÓPTERO?

Las historias alrededor del accidente en el que murió Kobe Bryant siguen en aumento, y una de ellas es la razón por la que la leyenda de los Lakers prefería viajar en helicóptero.
En una entrevista con Alex Rodríguez en diciembre de 2018, el mismo Kobe Bryant reveló la razón por la que le gustaba transportarse por las alturas: su familia, ya que las aeronaves le permitían estar más tiempo con sus hijas.
«El tráfico comenzó a ponerse muy, muy feo y estaba sentado en el tráfico y me perdía de cosas de la escuela porque estaba sentado en el tráfico. Tuve que encontrar una manera de seguir entrenando y concentrarme en el oficio, pero sin comprometer el tiempo familiar.
«Entonces fue cuando me fijé en los helicópteros, para poder bajar y regresar en 15 minutos y ahí fue cuando comenzó. Mi rutina siempre era la misma: pesas en la mañana, llevar a mis hijas a la escuela, volar, practicar como loco, hacer mi trabajo extra, atender a los medios, volar de regreso, recoger a mis hijas. Mi esposa me decía que ella podía recogerlas, pero yo le decía que no.
«Yo quiero hacerlo porque tengo viajes por carretera y momentos en que no veo a mis hijos… Así que cada vez que puedo verlos, pasar tiempo con ellos, incluso si son 20 minutos en el auto», expresó.