Aunque los Peugeot 208 y 2008 están a la espera de una nueva generación, el motor que usan para el mercado mexicano está plenamente vigente y continuará a la venta en los reemplazos de estos modelos.
Partiendo de que es confiable, la clave de un buen motor en un auto pequeño de uso diario no es solamente que entregue un muy buen desempeño o un buen rendimiento de combustible, más bien que tenga la capacidad de combinar ambos talentos en distintas situaciones y así el usuario obtenga las dos ventajas, porque es normal que algo muy poderoso implique un mayor gasto o que algo en teoría muy económico afecte la aceleración y, al final, tampoco sea tan ahorrador porque por su misma lentitud hace necesario usar mucho el acelerador.
Y mientras la gran mayoría de vehículos en los segmentos más vendidos del mercado mexicano, es decir los subcompactos (ya sean en formato de sedanes, hatchbacks o mini-SUVs) optan por motores aspirados que suelen estar rondando los 1.6 litros, entre 100 y 120 caballos de potencia.