Nuevo ataque de comando deja 20 muertos en el Congo

Veinte civiles murieron en la noche del domingo al lunes en un ataque del grupo Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) en Beni, en el este de la República Democrática del Congo (RDC), indicaron las autoridades locales.
«Hubo una incursión de las ADF en Apetina-Sana en la noche del domingo al lunes. Esas ADF mataron con arma blanca a dieciocho civiles», declaró a la AFP Donat Kibwana, administrador del territorio de Beni.
Hemos suspendido la búsqueda porque ha anochecido. La reanudaremos mañana [martes]. Hemos encontrado otros dos cuerpos. El balance es por tanto de veinte cuerpos», declaró a la AFP Lewis Salikoko, uno de los responsables de la sociedad civil de Oicha, que supervisa las búsquedas.
En el ataque varias viviendas fueron incendiadas. «Sin embargo, las autoridades ya habían sido puestas en alerta desde el domingo por la noche de la presencia de hombres sospechosos en el oeste de Oicha», lamentó Teddy Kataliko, uno de los responsables de la red de organizaciones de la sociedad civil de Beni.

Seguimos pidiendo a las Fuerzas armadas de la RDC (FARDC) que lancen operaciones por el oeste con el fin de salvar a los civiles», agregó.

Apetina-Sana es una localidad situada a 16 km al oeste de Oicha, capital del territorio de Beni que se encuentra en la carretera nacional número 4, en lo que los habitantes llaman el «triángulo de la muerte»: Mbau-Eringeti-Oicha.

Desde el pasado 28 de noviembre, el jefe del estado mayor de las FARDC, el general Célestin Mbala, está instalado con su equipo en Beni, y otro general del ejército, John Numbi, inspector general de las FARDC y cercano al ex presidente Joseph Kabila fue enviado de refuerzo algunos días después.

Originariamente, las ADF son rebeldes musulmanes ugandeses que se instalaron en 1995 en el este del actual Congo para efectuar ataques contra Kampala.

Actualmente ya no llevan a cabo ataques contra la vecina Uganda y se han implantado entre la población congoleña. Están acusados de haber masacrado a centenares de civiles desde octubre de 2014 en la región de Beni.

Desde el lanzamiento el 30 de octubre de operaciones militares contra sus feudos, han matado a más de 200 civiles, según un recuento de organizaciones locales de la sociedad civil.