En el saturado calendario ATP se hace un hueco desde este viernes (13:00, TDP y Eurosport) la tercera edición de la Laver Cup, Europa vs. Resto del Mundo. Bajo el reclamo del «orgullo de representar a tu continente» y «la pasión por el tenis», como explica Roger Federer, pero también por unas suculentas bolsas para los tenistas, el suizo ha conseguido consolidar la Ryder Cup del tenis que ideó junto a su empresa Team 8. Una competición sin carácter oficial ni puntos ATP, pero que convoca al espectáculo.
En el Palexpo de Ginebra (Suiza) reaparece Rafa Nadal, después del extenuante ejercicio de conquistar su decimonoveno Grand Slam el 8 de septiembre.
«Rafa lo hubiera tenido fácil para no jugar después de ganar el US Open, diciendo que necesitaba descanso. Sin embargo, está muy animado para la Laver Cup. Me dijo que creía en esto y que ya descansaría después», le alaba Federer.
De momento, el balear no jugará el viernes y podría formar un dobles con el anfitrión durante el fin de semana como ya ocurrió en la primera edición de Praga en 2017.
La de 2018, lesionado, no la jugó en Chicago. Las dos las ganó Europa.
