Cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador advierte que el problema del sargazo en el Caribe mexicano no es tan grave como ha escuchado, y que ya instruyó al secretario de Marina para limpiar el mar con ayuda de embarcaciones navales; seguro está mandando el mensaje de que los hoteleros no recibirán recursos federales como lo exigen, para un asunto que debe ser en todo caso, saneado por ellos mismos, si se parte de que se han enriquecido y con creces de la explotación de tierras costeras, sin importar el deterioro físico no sólo del entorno, sino también en lo que corresponden al ámbito social y el económico.
Tan sólo las dos decenas de hoteleros españoles en Quintana Rooy otros más empresarios, demandan al Gobierno federal mexicano, alrededor de 900 millones de pesos para limpiar las misma playas que ellos se han apropiado y hasta contaminado.
No se puede negar la dinámica de degradación del entorno sobre todo en donde el capital turístico de playa y sol han dominado y a la vez, generado un declive socio económico; sobre todo por la oferta turística de destinos complejos y completos conocidos como el “todo incluido”, que utilizan mano de obra que pagan en cifras paupérrimas, lo que genera riqueza al interior de los resorts, pero no de la urbanidad que las contiene, además de contribuir a la descomposición demográfica hasta de extrema violencia e inseguridad.
Es cierto que el sector hotelero y sus derivados en el Caribe mexicano, ahora mismo se enfrenta a pérdidas millonarias luego de la caída continua en la ocupación hotelera debido a la presencia de la plaga del sargazo, sobre la que el presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya (AHRM), Conrad Bergwerf, ha señalado que en los primeros cinco meses de 2019 ha habido “un impacto lamentablemente negativo” para el sector turístico, estimándose las pérdidas en 12 millones de dólares, sólo para los primeros dos meses de este 2019.
Los hoteleros no deberían esperar que “papá Gobierno” los rescate de una alga que se abreva por la misma contaminación del agua que el hospedaje de fantasía genera y que además degrada al propio mercado local. Limpiar tan sólo la zona costera de sargazo, no es el remedio final, pues este seguirá arribando por muchos meses más al Caribe mexicano y otras costas del Pacífico a lo largo de América Latina.
Acta Divina… “Sargazo no es problema grave, tiene solución”: Andrés Manuel López Obrador, mandatario presidencial.
Para advertir… Cabe señalar que investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) advierten que el sargazo degrada rápidamente todo ecosistema por lo que hay que actuar rápido.
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