Mueren altos jefes militares y políticos en intento golpista en Etiopía

El Gobierno de Etiopía aseguró haber abortado una intentona golpista en la región de Amhara que buscaba desestabilizar el país, en la que murieron, entre otros, el jefe del Estado Mayor del Ejército y el presidente de esa región.
Entre las víctimas mortales se encuentran el jefe del Estado Mayor del Ejército, el general Seare Mekonnen, así como el teniente general ya retirado Gezai Abera, asesinados anoche por el guardaespaldas de Seare en su residencia de Adís Abeba.
Desde la capital del país, Seare dirigía la operación militar para sofocar este levantamiento.
También murieron por heridas de bala el presidente de Amhara, Ambachew Mekonnen, y su asesor, Ezez Wasie, durante un ataque contra su oficina en Bahir Dar, capital regional, perpetrado por soldados golpistas.
El fiscal general regional, Migbaru Kebede, resultó a su vez herido y, según fuentes oficiales, recibe tratamiento médico.
Al poco tiempo de que se hiciera público el inicio de la intentona, el acceso a internet fue restringido en todo el país, situación que hoy todavía persiste, más de 15 horas después de que las fuerzas de seguridad aseguraran haber restaurado la normalidad.
En la capital, donde efectivos de las fuerzas especiales protegen la oficina del primer ministro, reina hoy la calma entre la población y grupos de soldados y policías patrullan las calles, según pudo constatar Efe. En su web, la Embajada de España en Etiopía señaló que, tras la asonada, “la situación es de calma”, pero recomendó “ejercer la mayor vigilancia y cautela en todo el país”.
El Gobierno etíope remarcó, además, su voluntad de salvaguardar la seguridad nacional e instó a los etíopes a que sean “guardianes de la paz y apoyen todos los esfuerzos para hacer responsables a los individuos sospechosos”.

Asaminew, supuesto cerebro de esta intentona y hasta ahora jefe de seguridad de la región de Amhara, había sido puesto en libertad gracias a una amnistía en febrero de 2018, tras casi una década entre rejas.

En 2009, fue uno de los militares arrestados por planear supuestamente un golpe de Estado para derrocar al entonces primer ministro, Meles Zenawi, por lo que fue condenado a cadena perpetua.