Los Warriors de Golden State se han acostumbrado a ir a las Finales de la NBA, y su victoria en Portland la noche del lunes certificó su quinta participación seguida. También se han acostumbrado a esperar para que la serie por el título comience, con pausas largas tras el trámite de liquidar la Final del Oeste.
Los Warriors de Golden State se han acostumbrado a ir a las Finales de la NBA, y su victoria en Portland la noche del lunes certificó su quinta participación seguida. También se han acostumbrado a esperar para que la serie por el título comience, con pausas largas tras el trámite de liquidar la Final del Oeste.
Cuando toque iniciar el primer duelo de la definición del título de la Liga, ya sea en Milwaukee o Toronto el 30 de mayo, habrán transcurridos 10 días para los Warriors. No es el paréntesis más largo en la historia de la NBA, pero iguala la pausa que Golden State tuvo en 2017, y es la tercera vez en su dinastía de cinco años en la que han tenido una semana para descansar.