Norcorea: asalto a embajada en España fue terrorismo

Corea del Norte calificó ayer de “ataque terrorista” el asalto a su embajada en Madrid, España, el mes pasado y pidió una “investigación” sobre este acto, reivindicado por un misterioso grupo de opositores.

Un portavoz de la Cancillería norcoreana dijo a la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA), que “una intrusión ilegal y la ocupación de una misión diplomática y un acto de extorsión son una grave infracción de la soberanía estatal y una flagrante violación de la ley internacional, y este tipo de acto nunca debería ser tolerado”.

El 22 de febrero, un grupo de personas irrumpió en la embajada de Corea del Norte en Madrid y se fue con ordenadores y documentos, destacó la agencia Yonhap.

Free Joseon, un misterioso grupo antinorcoreano, se responsabilizó del robo y dijo que compartió parte de la información obtenida de la embajada con el Buró Federal de Investigación (FBI) ante “su solicitud”.

 Se ha difundido que Free Joseon, antes conocido como Cheollima Civil Defense (DCC), está proporcionando protección a Kim Han-sol, hijo de Kim Jong-nam, el hermanastro asesinado del actual líder norcoreano, Kim Jong-un.

La KCNA informó que Norcorea sigue todo tipo de versiones que están surgiendo de que el FBI y el grupo antinorcoreano estaban involucrados en el “incidente terrorista”.

La agencia dijo que el norte también espera que las autoridades españolas “lleven a cabo una investigación del incidente hasta el final de manera responsable” para llevar a los terroristas y a los responsables ante la justicia, de conformidad con las leyes internacionales pertinentes.

La justicia española señaló el pasado miércoles a Adrián Hong Chang, un mexicano que reside en Estados Unidos, como presunto jefe del comando.

Según la Audiencia Nacional, Hong Chang “entró en contacto con el FBI” cinco días después del asalto, “con el fin de facilitar información relativa al incidente en la embajada”.

El juez español José de la Mata indicó en el auto de este alto tribunal que dos de los asaltantes llevaron al agregado comercial a una sala subterránea y querían obligarlo a desertar, a lo que se negó.

En un comunicado difundido la semana pasada, el DCC afirmó por su parte que la organización compartió información de enorme valor potencial con el FBI bajo términos de confidencialidad de mutuo acuerdo”. Aseguró que el ataque no estaba vinculado con la cumbre en Hanói entre los presidentes Kim Jong-un y el estadounidense Donald Trump.

El grupo anunció asimismo la suspensión temporal de sus operaciones, aunque prometió que llegarían “grandes cosas”.

“Somos un grupo de tránsfugas que se reunieron con compatriotras del mundo entero”, explicó el grupo en en su página web.

El comunicado añade que existen preparativos para derrocar al dirigente norcoreano, pero que se vieron perturbados por todo el ruido mediático. “Se suspendieron las actividades de los miembros. Los medios han de dejar de meter las narices en los asuntos de nuestro grupo”.