Ante los altos niveles de violencia registrados en el país y sobretodo en la entidad potosina, el Arzobispo Jesús Carlos Cabrero Romero mencionó el fenómeno de la violencia como el mayor peligro social a combatir, por lo que pidió a las autoridades enfrentarlo desde su origen.
Califica la violencia como una enfermedad que hace que la sociedad y el gobierno normalice las cifras como si fuera solo una estadística, por lo que se debe voltear a ver que son vidas humanas las que se exponen, tanto de criminales como de víctimas.
Hizo un llamado a la recuperación de los valores y no acostumbrarse a los hechos violentos que tanto daña a la sociedad como en el caso de los linchamientos, por lo que pidió enfrentar el fenómeno social a través del núcleo familiar.
Citó el caso de las familias disfuncionales como el principal medio de proliferación de la violencia, el cual debería ser uno de los focos de atención para su erradicación, por lo que desde sus capacidades estará insistir a los fieles católicos el conservar los valores en favor de su integridad, haciendo un llamado también a instituciones educativas para promover la no violencia.