Cosas de la ciudad: Policía Vial se ha convertido en un elefante blanco

Por: El Diablo Cojuelo

INSERVIBLES.- Los reductores de velocidad ubicados a lo largo de la Avenida Salk, desde la Avenida Salvador Nava hasta el Periférico, en nada contribuyen para lo que fueron instalados pues están totalmente deteriorados, destruídos, lo que aprovechan los conductores de camiones urbanos, de unidades de personal, autos y motocicletas para tomar la rúa como pista de carreras poniendo en peligro sus propias vidas y la de los transeúntes que tienen que cruzar la arteria.
EN HORAS PICO.- Eso se puede comprobar en las horas pico diariamente, como en las mañanas en que madres de familia llevan a sus hijos a las escuelas que se encuentran en esa amplia zona. Peligrosamente tienen que hacer malabares para «torear» a los vehículos cuyos conductores no respetan y a toda velocidad pasan los reductores sin importarles dar el paso a las madres de familia y a los escolares.
¿DONDE ESTÁN?.- Anteriormente Municipio enviaba a elementos de Seguridad Vial para obligar a los conductores a detenerse para darles paso a los niños y sus progenitoras y llegar con bien a sus respectivas escuelas, pero ahora tal parece que no les interesa la seguridad de los mismos pues no se ve a ningún elemento de esa corporación para evitar algún incidente lamentable. ¿O esperarán a que suceda alguna tragedia para poder reactivar esos operativos de protección al estudiantado?. Al tiempo.
MALA IMAGEN.- De plano que no hay autoridad alguna para evitar la mala imágen que presenta el Centro Histórico de la Ciudad con la presencia a toda hora del día y noche de indigentes que en estado de ebriedad hacen sus necesidaes físiológicas delante de la gente, como puede apreciase en la Plaza del Carmen que es un sitio donde concurren miles de potosinos y visitantes.
DE NADA SIRVEN.- Es inconcebible que en ese lugar, donde hay decenas de policías «vigilando», se puedan presentar este tipo de situaciones y ahora más que nada que estamos en vísperas de que muchos turistas vienen a la capital potosina a pasar las vacaciones de Semana Santa y a disfrutar de los eventos religiosos que se realizan como la tradicional Procesión del Silencio que está catalogada como una de los mejores e impresionantes eventos a nivel no solo estatal y nacional sino a nivel internacional. Urge que se tomen cartas en el asunto para que nuestros visitantes y los mismos potosinos tengamos una mala imagen del Centro Histórico de San Luis Potosí.
Y SIGUEN BASTOS.- Otro problema que merece toda la atención de las autoridades son los abusos que siguen cometiendo contra los usuarios los taxistas (no todos, algunos cuantos, pero por unos las llevan todos) al cobrar exgeradas tarifas por sus servicios. Diariamente hay quejas de gente que utiliza el servicio para trasladarse a equis destino y con toda impunidad alteran el taxímetro para cobrar lo que se les viene en gana y cuidado con quien proteste pues de inmediato vía radio se comunican en clave con otros ruleteros para inventar que son agredidos por él o los usuarios y hasta una felpa les vienen propinando.
SIN SOLUCIÓN.- Parecería que estos abusos iban a terminar con el cambio de dirigente en la SCT local pero no, continúan a tambor batiente sin que se ponga una solución real al grave problema. Cabe preguntar ¿y los inspectores de la dependencia dónde están?. ¿Cobran sus sueldazos por no hacer la función para los que están contratados?.
¿QUE NOS PASA?.- Las obras que se realizan en la calle Guerrero, tal parece que ya quedaron en el olvido pues ya tienen varios días en que no se ve ningún avance. Es más ni siquiera se ven a trabajadores que relicen su labor de rehabilitación de la rúa lo que viene a perjudicar principalmente a los comercios que se encuentran en la zona los cuales han registraado pérdidas considerables en sus ventas. Como decía el personaje que interpretaba el talentoso comediante Héctor Suárez ¿Que nos Pasa?.