En días pasados habitantes del municipio de Huehuetlán denunciaron la presencia de aguas residuales y contaminantes en el rio Huichihuayán provenientes de la empresa de jugos Citrofrut, lo cual ha afectado a las familias que utilizan el vital líquido en sus actividades diarias y de consumo.
En relación a la contaminación de este rio, Rogel del Rosal, quien es miembro de la Coordinadora de Organizaciones de Campesinos e Indígenas de la Huasteca Potosina, expresó que esta se ha dado debido a la gran apertura otorgada a empresa particulares que no tienen ninguna responsabilidad con el medio ambiente pues no les importa la vida de la gente ni tampoco los ecosistemas, resaltando que esa juguera no solo contamina el rio sino también al aire y que también está generando enfermedades pulmonares y en la piel entre la población local.
Reiteró que este tipo de empresas que utilizan el agua y la contaminan deben de ser reguladas en su funcionamiento por parte de las autoridades correspondientes, y enfatizó que la gente de la huasteca no quiere que el agua se utilice ni para el fracking ni para la minería, así como tampoco para su uso desmedido en los megaproyectos inmobiliarios como los que se pretenden imponer y los cuales afectarían a las zonas de recarga de los acuíferos del Valle de San Luis Potosí.
Rogel del Rosal, explicó que es a casusa de este proceso de deterioro del recurso hídrico, que es vital para los ecosistemas y para el consumo humano, que se vuelve necesario la creación de una Ley General de Aguas, así como de una Ley Estatal, elaboradas sobre la base de que el agua es un derecho humano y que sirvan de punto de partida para la restauración de los ecosistemas.